Kevin Spacey fue acusado el lunes de haber drogado a una víctima de agresión sexual antes de forzarlo a un acto sexual, según el testimonio en un tribunal de Londres, siendo esta la última denuncia contra el ganador de dos Oscar, tras una serie de acusaciones de mala conducta contra él que abarcan más de cuatro décadas.
La presunta víctima, cuyo nombre no se ha hecho público, calificó a Spacey de "vil depredador sexual" en el juicio celebrado en el Tribunal de la Corona de Southwark, en Londres.
En su testimonio, la víctima acusó al actor de agredirlo sexualmente mientras dormía en el apartamento de Spacey en Londres, diciendo que "se quedó dormido" o que estaba "drogado" de antemano, mientras que el abogado de Spacey, Patrick Gibbs, argumentó que la presunta víctima había consentido el encuentro sexual.
Las acusaciones se producen después de que otra presunta víctima en el mismo juicio también acusara a Spacey en una entrevista en vídeo ante un tribunal londinense de besarla en el cuello y agarrarle la entrepierna, al tiempo que le instaba a "ser guay", tras darle marihuana y alcohol.
Spacey se ha declarado inocente de todos los cargos que se le imputan, entre ellos los de atentado al pudor, agresión sexual y provocar que una persona participe en una actividad sexual con penetración no consentida; y ha negado todas las acusaciones en su contra de supuesta agresión sexual contra cuatro hombres entre 2001 y 2013.
La caída en desgracia de Spacey comenzó en 2017, cuando surgieron acusaciones de agresión sexual derivadas de una serie de incidentes que se remontan a la década de 1980. Una de las primeras presuntas víctimas en presentar acusaciones contra Spacey fue el actor Anthony Rapp, quien declaró a Buzzfeed News en 2017 que Spacey le hizo insinuaciones sexuales cuando era un adolescente de 14 años en 1986-Spacey fue declarado no responsable de agresión por un jurado en un juicio civil en Nueva York el año pasado
El juicio se centra en la última acusación contra Spacey, y se produce casi siete años después de que supuestamente manosease a un ayudante de camarero en un popular bar de Nantucket, Massachusetts, frente a la costa de Cape Cod. Spacey fue acusado de agresión y atentado al pudor en ese caso, aunque la Fiscalía de Distrito de Cabo e Islas retiró los cargos en 2019, después de que los fiscales no entregaran el contenido de un teléfono en cuestión y después de que la presunta víctima invocara su derecho constitucional contra la autoinculpación.
A qué atenerse
Spacey podría enfrentarse a penas de prisión si es declarado culpable, ya que el cargo de provocar que una persona participe en una actividad sexual no consentida conlleva una pena máxima de cadena perpetua. Sin embargo, si es absuelto, Spacey -cuya carrera como actor se ha visto gravemente marginada desde que se hicieron públicas las acusaciones de Rapp- declaró a la publicación alemana ZEITmagazin que planea volver a actuar.
Aparte de dos papeles no acreditados, Spacey solo ha actuado dos veces desde que fue cortado de House of Cards de Netflix en 2017, incluyendo en la malograda Billionaire Boys Club (2018), que recibió críticas decepcionantes y generó menos de 3 millones de dólares en taquilla en todo el mundo, según Box Office Mojo.
