Raul Alberti, Real Estate Coach nacido en Italia y radicado en México hace años, considera que para resolver el problema de dinero no basta solo con “trabajar hasta el cansancio”. Según el experto en el tema, primero es necesario encarar y tomar decisiones claves, abandonar creencias limitantes, desarrollar hábitos para la consecución de las metas y un sinnúmero de variables más que, muchas veces, hace que veamos el éxito económico como algo difícil o casi imposible.

Alcanza tu éxito económico es una guía esencial de la optimización del gasto, el ahorro y la inversión. Elementos que el autor aprendió a manejar a lo largo de su exitosa carrera como asesor inmobiliario e inversionista.

Cada capítulo, cuenta en una entrevista con Forbes Argentina, “representa una etapa de tu crecimiento personal y económico, lo que permite que este libro sea adaptable a tus circunstancias y se vuelva un manual de consulta sin importar el nivel en que te encuentres”.

¿Qué te motivó a escribir "Alcanza tu éxito económico" y compartir tus experiencias?

La verdad es que, en todos estos años, he visto en los diferentes lugares donde he vivido (Italia, Francia, Dubái, México, Latam en general) que no hay una cultura sobre el ahorro y las finanzas. Entonces decidí compartir todo lo que a mí me ha servido, todo lo que me ha ayudado a tener un éxito económico real e ingresos pasivos que me permiten vivir al día de hoy sin ningún tipo de problema. Se empieza rompiendo las creencias limitantes sobre el dinero, que de hecho se habla de esto en el libro, y con organización: saber realmente cómo organizar nuestros ingresos y los gastos que tenemos y, desde ahí, empezar a invertirlos en diferentes cosas que te generan dinero. La idea era compartir y darle oportunidad a muchas más personas de tener claridad sobre esto, porque al día de hoy en la escuela no te lo enseñan y tampoco hay cursos que de verdad te expliquen todas estas cosas o a lo mejor hay pero no son accesibles..

¿Cuál fue el momento clave en tu vida que te llevó a comprender que el éxito económico va más allá del dinero?

Empezó tarde, porque, de hecho, fue prueba y error, prueba error. O sea, alrededor de los 37- 38 años, hace seis o siete años, aprendí y entendí qué era de verdad el éxito económico.

¿Y qué es el éxito económico?

El éxito económico no era solo poder ganar mucho más, sino también saber ahorrar, gestionar los gastos, conocer cuáles son los gastos que de verdad necesitamos hacer o son importantes en el día a día y cuáles son gastos “tontos” que no nos sirven y nos están alejando de esto. Entonces, te diría, hace siete años empecé a profundizar en esto un poco más y dije “es bueno compartirlo con muchas personas”.

Mencionás la importancia de abandonar creencias limitantes. ¿Cómo identificaste y superaste tus propias limitaciones mentales en tu viaje hacia el éxito económico?

Las creencias limitantes son súper importantes porque muchas personas no es que son malas o no pueden hacer dinero, simplemente tienen creencias limitantes que, justamente, como dice la palabra, los están limitando y no pueden alcanzar lo que ellos quieren en su vida. Entonces, yo logré ver cuáles son o cuáles eran mis creencias limitantes gracias justamente a un curso relacionado a este tema. Dije “wow, esto es algo súper interesan y que todas las personas necesitan saber”. Me di cuenta que muchas de las creencias limitantes que nos limitan al día de hoy estaban relacionadas con dinero.

¿Podés compartir alguna anécdota personal que haya sido fundamental en tu desarrollo personal y económico?

Yo creo que lo que a mí ha cambiado, aunque cada persona es diferente, es tener tranquilidad y seguridad. O sea, muchas personas buscan esta tranquilidad y seguridad económica. Yo descubrí que me sentía tranquilo y sin presión, por ejemplo yo que estoy en ventas y necesito generar comisiones, cuando aprendí a tener un dinero ahorrado en mi cuenta como base. Sentí que desde aquel momento yo me sentía tranquilo, me sentía seguro porque sabía que si iba a pasar una crisis o tenía un mal momento, tenía ahí el dinero. Ahora, esto no me estaba desenfocando de producir, de empujar y de hacer lo que tenía que hacer, pero sí definitivamente el tener un dinerito ahorrado que no vas tocando, te genera tranquilidad en la mente, en el cuerpo, en tu modo de ser, en tu modo de hablar. Cuando tú estás tranquilo, estás seguro, todo a tu alrededor empieza a funcionar.

¿Cuáles considerás que son las decisiones más críticas que las personas deben tomar para alcanzar su éxito económico?

Las decisiones más críticas yo creo que son las decisiones de todos los días. Al día de hoy la sociedad, el advertising, la publicidad; nos dice que tienes que tener el último iPhone, tienes que vestir a la moda, tienes que enseñar y presumir para que la gente te evalúe como una persona de éxito. Entonces, yo creo que es un reto diario entender que no es así, que realmente lo que necesitamos es ganar seguridad en nosotros y no sentirnos más seguros vistiendo ropa cara o teniendo cosas de último momento. Entonces, esta es la clave para poder empezar a dar los primeros pasos hacia el éxito económico. 

¿Hay alguna decisión que tomaste en tu carrera que considerás como un punto de inflexión en tu camino hacia el éxito?

Sí, realmente tomé decisiones para cambiar mi rutina mañanera. O sea, muchas personas dicen o piensan que la venta es solo venta y tienes que ser bueno en las ventas para hacer más dinero, y no es así. Todo empieza por nosotros. Entonces, en mi caso, la decisión fue tener una rutina diaria: despertarse temprano, agradecer, escribir en una libreta todo el agradecimiento por lo que tengo y lo que quiero tener, meditar, leer. Todo esto hace que yo empiece el día al cien, que mi cerebro esté al cien y, que mi energía esté elevadísima.

Hablás de la optimización del gasto, el ahorro y la inversión. ¿Podrías dar ejemplos prácticos de cómo las personas pueden implementar estos principios en su vida cotidiana?

Algunos ejemplos reales de gastos tontos que la gente quizás no piensa… Por ejemplo, el café. Todo los días voy a Starbuck y un café me cuesta entre US$ 4 o US$ 5. Repetido por seis días a la semana son 24 dólares. Por mes son 100 dólares. Cien dólares es mucho dinero que tú podrías, al día de hoy, por ejemplo, invertir en Bienes Raíces - porque hay inversiones de 100 dólares- y generar el dinero para pagarte el café u otras cosas. Entonces, en ese caso,  si preparas el café en casa y te lo llevas a la oficina en un termo seguramente ahorras mucho más. Y este ahorro, entonces, ya lo puedes poner en algo que te genere el dinero para poder comprarte el café de Starbucks todos los días. Ahora… ¿Cuál es el punto interesante? Nuestros lujos los pagamos a través de nuestras inversiones. Entonces… ¿Quiero café de Starbucks todos los días? Okey, inviertes una cantidad que te dé un rendimiento de 5 dólares diarios, así tú no estás usando de tu capital: estás usando tus ingresos pasivos para permitirte lo que a tí te gusta más, que puede ser un café al día. un viaje cada año, un coche nuevo; etcétera.

¿Cuál es tu enfoque principal cuando se trata de invertir, y cómo ha evolucionado a lo largo de los años?

Con los años ha cambiado un poco mi enfoque. Primero era algo que me genere patrimonio y que sea muy seguro, después se transformó en diversificar en algo que puede ser un poco menos seguro, pero da más rendimiento. Yo le diría a todas las personas que se acercan a la inversión, que al empezar piensen en inversiones a mediano y largo plazo y que sean seguras. ¿Por qué? Porque estas primeras inversiones, también. son las inversiones que van a generar interés compuesto, y el interés compuesto te permite ahorrar un pequeño dinero o invertir un pequeño dinero día a día, o en ese caso mes a mes, permitiendo al final que este capital sea grandísimo. 

Mencionás que cada capítulo representa una etapa de crecimiento personal y económico. ¿Cómo lograste hacer el libro adaptable a diversas circunstancias y niveles de experiencia financiera?

Yo siento que, como empecé desde cero y fue prueba-error, quise tocar los temas como yo los viví: como persona normal, sin gran capital, sin gran educación financiera, demostrando cómo yo he evolucionado paso a paso. El objetivo es que cada persona, en cualquier nivel, pueda ir avanzando.