Tal como lo adelantara Forbes hace tres días la presión interna que sufrió el presidente Joe Biden tuvo efectos. El presidente acostumbrado a tener que superar obstáculos entre las preferencias electorales decidió esta vez dar un paso al costado. El escenario de un Donald Trump fortalecido como nunca tras sortear, en los que muchos consideran una intervención divina, su intento de asesinato fue demasiado.
En su comunicado el presidente destaca sus logros económicos y el hecho de poner a la primer afroamericana en la Corte Suprema de Justicia. También destaca sus medidas para expandir la salud pública y le primera ley en 30 años sobre armas seguras. Sin embargo reconoce que su partido desea otro candidato.
“Compañeros demócratas, he decidido no aceptar la nominación y concentrar todas mis energías en mis deberes como presidente durante el resto de mi mandato. Mi primera decisión como candidata del partido en 2020 fue elegir a Kamala Harris como mi vicepresidenta. Y ha sido la mejor decisión que he tomado. Hoy quiero ofrecer todo mi apoyo y respaldo para que Kamala sea la candidata de nuestro partido este año. Demócratas: es hora de unirse y vencer a Trump. Hagámoslo”, pidió Biden.
Kamila Harris ahora se posiciona como la gran referente, por género y juventud contra Donald Trump. El bitcoin dejó su carrera alcista en un reconocimiento de que la nueva candidata mejora las posibilidades demóctras.
En un momento crítico de la campaña presidencial y cuando los tiempos se agotan para mostrar un candidato que pueda remontar la campaña demócrata, Joe Biden le dio oxígeno a su partido. La carrera presidencial se resetea y nuevos debates encenderán una de las campañas presidenciales más seguidas a nivel mundial en todos los tiempos.