Las cifras son contundentes: el mercado de los autos eléctricos aumenta en el mundo de manera exponencial y va en camino a posicionarse como un segmento muy relevante en el sector automotriz. "Capaz que es la mayor revolución en los últimos 80 o 90 años de la industria", consideró Santiago Martínez, director de Autodata. "En el año 2020 se vendieron entre 200 y 300 vehículos eléctricos, en el 2021 fueron 800, en el 2022 más de 1.200 y este año ya vamos en alrededor de 900", graficó.
Hoy en día, son alrededor de 3.000 los vehículos de este tipo que ya se encuentran en circulación, con la expectativa de que el número crezca aún más. "Hay más de 40 marcas que tienen a disposición un vehículo eléctrico o uno híbrido para ofrecerles a sus clientes. Eso hace cinco años era prácticamente nulo", indicó durante la primera edición local de Forbes Insurance Summit.
Volvo es una de las empresas automotrices que resolvió abrirse a este nuevo mercado y llevarlo incluso un paso más allá. "Se tomó la decisión de que Uruguay sea el cuarto país en todo el mundo donde solamente se vendan autos eléctricos o híbridos enchufables, ya no vendemos motores a nafta y lo hemos hecho con mucho éxito", indicó Martín Oyarzún, gerente general de Volvo Cars.
"Para Suecia (uno de los países donde se producen los autos de esta marca) Uruguay tiene un lugar muy especial y lo miran por varias características: es pequeño en kilómetros, no tiene grandes fallas geográficas y cuando enchufas el auto no se prende la central nuclear", detalló.
Junto con la electrificación de los vehículos de la marca, también se innovó en materia de seguridad, un aspecto muy importante para la empresa que tiene dentro de su propósito que no haya ningún fallecido ni lesionado de gravedad dentro o afuera de uno de sus autos. Además de sensores, radares y cámaras dispuestos para que los conductores tengan un mayor control al momento de frenar, acelerar y estacionar, también se hace especial hincapié en la velocidad, con la especificidad de tener dos llaves: una de ellas para limitar los kilómetros por hora, con un máximo de hasta 180.
En la misma línea, el presidente de la Unidad Nacional de Seguridad Vial (Unasev), Alejandro Draper, aseguró que la velocidad es uno de los asuntos que más convocan y preocupan al hablar de seguridad vial. "Es transversal y toca todo", aseguró. Con el Centro de Monitoreo de Radares recientemente instalado por el Ministerio de Transporte (MTOP) se buscará, por un lado, controlar que no se exceda el límite establecido en las rutas y, por el otro, generar mayor información que servirá al momento de analizar las causas de los accidentes.
"Todo lo que se está haciendo con este centro va a ser un antes y un después: vamos a tener datos y causas de los siniestros que al día de hoy no los tenemos. Los radares se colocan para prevenir, para educar y tienen que estar señalizados, si no sería solo para recaudar. Lo que ha hecho la Unasev es informar al MTOP lo que nosotros denominamos 'puntos rojos', es decir aquellos siniestros donde hay fallecidos y lesionados graves", expresó y aseguró que el uso del celular es otro de los factores que inciden cuando hay accidentes de tránsito.
"Curva de aprendizaje"
Con la llegada de nuevos vehículos que incluyen diferentes formas de combustión y más tecnología, las aseguradoras están en constante formación para diseñar seguros que se ajusten a los cambios y que sean beneficiosos para los asegurados.
"Nos encontramos en la curva de aprendizaje, el conocimiento y la experiencia todavía es muy prematuro no solo en Uruguay sino a nivel mundial. El seguro necesita como elemento fundamental contar con la estadística y con la práctica que nos permita, desde el lado actuarial, generar una tarifa y un producto acorde y justo con la realidad de riesgo que representa", dijo Leonardo Aguerrebere, gerente comercial de Sancor Seguros.
"Somos una compañía que aprendemos poniendo dinero. Es un camino que vamos a recorrer juntos consumidores, terminales de marca, corredores y la industria aseguradora como forma de apalancar un crecimiento y una proyección que se viene", agregó.
Asimismo, indicó que proyectos como "seguros a medida" para los vehículos, basados por ejemplo en la telemetría, son productos que si bien a nivel mundial en algunos casos han funcionado, en Uruguay no tuvieron la misma penetración. "Tal vez no era en el momento de madurez del público uruguayo, pero no fue un producto que definamos como de éxito", expresó.