El rol del gerente financiero toma cada vez más relevancia para las empresas en Argentina y resulta clave para ayudar al CEO a conducir a buen puerto el negocio. En el panel “Liderar en la tormenta” de la quinta edición del Forbes Money y CFO Summit se analizó el alcance de su posición, sus desafíos y las posibilidades que la tecnología le aporta a los equipos.
Hernán García, Chief Financial Officer de Naranja X; Maximiliano Raimondi, CFO de Lemon; y Fabiola Zandalazini, directora Regional de Finanzas de Toyota Argentina y Brasil, fueron los encargados de contar en primera personas sus experiencias en esta mesa moderada por Fernando Heredia, editor de Money y Energy de Forbes Argentina.
Frente al contexto argentino, el rol del CFO fue evolucionando, de un lugar más de análisis financiero a uno de control de gestión más orientado a la estrategia y la capacidad de alinear a la compañía detrás de objetivos de mediano plazo. Al menos así lo analiza García, y asegura: “La asignación de recursos es clave, pero no solo monetarios, sino otros activos de la compañía y eso es lo más desafiante, a lo que se le suma la coyuntura argentina. Lo central es balancear el corto y el largo plazo”, dijo al inicio de la charla.
En línea, Raimondi aclaró que los desafíos cambian según la compañía y el mercado en el que cada CFO se desempeñe, pero en todos los casos requiere capacidad de adaptación. “Se ve que muchos CFO pasan al rol de CEO, eso está dado por la capacidad de resiliencia y las tormentas que estamos acostumbrados a vivir. Analizamos datos y vemos transversalmente a la compañía: allí es clave el desarrollo del pensamiento estratégico. Los responsables de finanzas en Argentina tenemos una corteza en la piel muy ancha”, mencionó el ejecutivo de Lemon.
Para Zandalazini, por su parte, adelantarse a los hechos resulta fundamental en su día a día: “La clave, para los CFO, siempre fue que podamos adelantar lo que va a pasar para que la charla sea desde el lugar de las contramedidas y no desde contar lo que está pasando. En el caso de Toyota, estamos muy cerca no solo del CEO sino de la operación y es clave que podamos ser un instrumento para ellos”.
La formación de equipos es otro tema a trabajar. La financiera de Toyota explicó que, en su caso, la compañía inició hace tres años un proceso de regionalización para integrarse con Brasil y Venezuela que resultó muy beneficioso: “Logramos hacer una integración y en el área de finanzas somos totalmente internacionales. Esa sinergia nos permitió generar oportunidades y lograr eficiencias en los procesos. Sumado a digitalizaciones regionales que se implementaron para simplificar procesos operativos y darle oportunidades a talentos para que sean los creadores de la nueva etapa de las finanzas”.
La digitalización de las finanzas está dentro de su scope. García opinó que el efecto es muy positivo. “Desde la explotación de datos al análisis de la información, hay herramientas que hoy usamos y antes eran impensadas para entender dónde están las grandes iniciativas. Hoy hay herramientas para visualizar en tiempo real cómo se mueven los recursos y tienen un valor muy grande. Es un factor que nos permite hacer nuestro trabajo más eficientemente, y el gran título hacia adelante en innovación es el impacto de la inteligencia artificial en todo esto”, dijo el CFO de Naranja X.
Mientras que en Lemon, la tecnología y la innovación se respiran desde su fundación. “La tecnología es vertiginosa. El ADN de Lemon es muy tecnológico, con lo cual va a evolucionar a pasaos agigantados la inteligencia artificial. La otra cara de la moneda es que hay que tener los cuidados y las medidas necesarias frente a su avance. Está buenísimo, no te podes quedar atrás, pero desde nuestro lado tenemos el rol de generar esos ambientes de control y estar atentos”, aportó Raimondi.