"Con el colectivo Diversa, a través de ID Retail tenemos medido el impacto que tiene no acceder a una prenda de ropa", contó la gerenta de Insights & Analítica de esa consultora, Ana Gudynas, quien además es activista por la diversidad corporal.
"Le pasa a más del 60% de la población tener dificultad para acceder a la ropa que le gusta en su talle, porque una cosa es vestirme con lo que encuentro y no con lo que me gusta", explicó.
La situación es más compleja con un sector de la población dispuesto a tomar decisiones más radicales. "El 35% de las personas que no accede a la ropa que le gusta toma medidas drásticas, como empezar una dieta restrictiva o hacer ejercicios drásticos para modificar el cuerpo. Hay gente que empieza con trastornos de ansiedad o depresión, deja de ir actividades, a la playa, un casamiento", ejemplificó.
También se refirió a la relación entre el peso y el salario, algo que recién se está empezando a medir. "Hay estudios, no todavía para Uruguay pero sí salió hace poquito de Estados Unidos que analizan la brecha laboral. La conclusión es que los hombres ricos son igual de ricos tengan el peso que tengan, pero en el caso de las mujeres, que ya sabemos que tenemos un promedio salarial inferior, las mujeres ricas son mucho más flacas que las mujeres gordas", explicó la socióloga.
Otra dimensión del problema que mencionó fue la médica: "Decís que te duele la rodilla y te mandan adelgazar, mientras que a una persona flaca le mandan otros estudios y le hacen lo que tienen que hacer".