Tras la muerte del presidente de Irán, Ebrahim Raisí, en un accidente de helicóptero; el líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, nombró al primer vicepresidente del país, Mohammad Mokhber, presidente en funciones antes de unas nuevas elecciones.
Se trata de un viejo aliado de los partidarios de la línea dura iraní, que en su momento dirigió la empresa estatal de inversiones del país y supervisó una venta de armas a Rusia.
Datos clave
Mokhber, de 68 años, ocupaba el cargo de vicepresidente primero del fallecido ex presidente Ebrahim Raisi desde 2021. La constitución iraní permite nombrar varios adjuntos, y antes de la muerte de Raisi el país tenía 12 ejerciendo simultáneamente.
Desde 2007 hasta su ascenso a la vicepresidencia, Mokhber fue el jefe de la Ejecución de la Orden del Imán Jomeini, también conocida como EIKO o Setad, una empresa de inversiones fundada originalmente como conglomerado para poseer propiedades privadas incautadas tras la revolución de 1979, que fue sancionada por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos en 2013.
El propio Mokhber fue sancionado por EE.UU. en 2021 por su papel en la dirección de Setad, que según el Departamento del Tesoro “confiscaba tierras y propiedades de opositores al régimen, incluidos opositores políticos, minorías religiosas e iraníes exiliados” y creaba una “economía de resistencia”.
Mokhber fue director del Banco Sina, una de las mayores instituciones financieras de Irán, que también fue sancionado en 2018, y trabajó para la Fundación Mostazafan, una entidad benéfica religiosa que posee miles de millones de dólares en propiedades. Según el gobierno norteamericano, la fundación se creó para confiscar propiedades de bahaíes y judíos iraníes, pero desde entonces se convirtió en una de las mayores empresas de Irán y sirve como “red de patrocinio” del líder supremo Jamenei.
Mokhber también fue sancionado personalmente por la Unión Europea en 2010 debido a las preocupaciones que generó el programa nuclear iraní, pero estas sanciones se levantaron dos años después.
En 2022, Mokhber viajó a Rusia para supervisar la venta al ejército ruso de aviones no tripulados y misiles balísticos Shahed de fabricación iraní, según informó entonces Reuters, que desde entonces se utilizaron en el campo de batalla en Ucrania.
Últimas noticias
El lunes por la mañana se confirmó la muerte del presidente Raisi y del ministro de Asuntos Exteriores de Irán, tras una búsqueda que duró horas. El helicóptero donde se transportaban se estrelló en el noroeste de Irán, según informaron los medios estatales.
Según la Constitución iraní, Mokhber dispondrá ahora de 50 días para convocar a unas nuevas elecciones en sustitución de Raisi. La fecha de la elección será elegida por un consejo de tres personas que incluirá al presidente de la Asamblea Consultiva Islámica, al jefe del poder judicial y al primer adjunto del último presidente, que era Mokhber.
El líder supremo Jamenei anunció el lunes el estado de luto por Raisi y el gobierno aún no indicó con exactitud cuándo tiene previsto celebrar las nuevas elecciones. Mokhber no comentó si piensa presentarse al cargo.
Antecedentes
A diferencia de otros políticos iraníes de línea dura como el incendiario Mahmud Ahmedineyad o el propio Raisi, Mokhber mantuvo un perfil relativamente bajo antes de convertirse en vicepresidente primero en 2021. Nunca ocupó un cargo electo en la República Islámica y no trabajó en el gobierno hasta que asumió la dirección de Setad.
Estados Unidos describió el enorme fondo de inversiones de Mokhber como un «laberinto de 37 empresas aparentemente privadas, muchas de las cuales son empresas pantalla». Según el Departamento del Tesoro, el propósito de Setad es generar millones de dólares a través de inversiones fuera de los libros para el gobierno iraní.
Estos ingresos están “protegidos” tanto del público iraní como de los reguladores internacionales, alegó Estados Unidos cuando emitió las sanciones contra la empresa en 2013. Según una investigación de Reuters de ese mismo año, Setad canalizó estos beneficios directamente a los bolsillos de Jamenei, que ocupa el cargo de Líder Supremo desde la muerte del líder de la Revolución iraní, Ruholá Jomeini, en 1989.
Desde entonces, Setad adquirió participaciones en una variada cartera de empresas, entre ellas un importante banco, un broker, una compañía de seguros, empresas energéticas y la mayor compañía de telecomunicaciones de Irán.
Sorprendente
El presidente ruso Vladimir Putin ya se puso en contacto con Mokhber para ofrecerle sus condolencias, según informó el servicio estatal ruso de noticias TASS, poco después de que fuera nombrado presidente en funciones.
“Vladimir Putin subrayó que conocía bien a Ebrahim Raisi y le tenía en alta estima como un socio fiable que hizo una contribución personal inestimable a la expansión de las relaciones amistosas entre Rusia e Irán”, declaró el Kremlin en un comunicado.