¿Cómo llegás a convertirte en el CEO de UCM Falk?
Toda mi vida laboral estuvo vinculada a empresas multinacionales. Pasé por grandes compañías de consumo masivo, como Mondelez International y Pepsico.
Luego di un paso a la industria automotriz como gerente general del Grupo BMW en Uruguay. Y finalmente recalé en la salud, industria completamente nueva para mí.
Yo estaba muy próximo a firmar una propuesta laboral con otra compañía y una llamada del CEO de Falk en Latinoamérica cambió mis planes.
Me pidió si me podía tomar un avión al día siguiente e ir a Colombia a conocerlo a él y a todo el equipo. Con nada que perder, me subí al avión.
Me encantó la propuesta, el equipo y, sobre todo, trabajar en una compañía que tiene un propósito muy movilizador que tiene que ver con salvar vidas.
Viniendo de un mundo tan distinto, ¿qué desafío supone estar al frente de UCM Falk?
A nivel estratégico los desafíos pueden ser similares a los que cualquier gerente general tiene que enfrentar en una compañía de este tipo.
La gran diferencia que tiene dirigir UCM, versus otro tipo de compañías, es que trabajamos con situaciones críticas: somos la primera línea de atención ante cualquier evento de gravedad.
Tenés que estar preparado para tomar decisiones rápidas y efectivas bajo muchísima presión. En este caso, a diferencia de cualquier otro servicio, la vida de los pacientes depende de las decisiones que vos puedas tomar en el momento.
¿Qué objetivos te planteás para tu gestión al frente de UCM Falk?
Mi objetivo personal es contribuir al crecimiento de la compañía y a la excelencia en la prestación de los servicios de emergencia médica. A nivel profesional, busco incursionar en nuevos modelos de negocios que permitan, de alguna manera, revolucionar la atención médica en Uruguay.
¿Qué desafíos y oportunidades supone para UCM ser parte del Grupo Falk?
Si bien UCM es parte del grupo Falk hace muchos años, recién en los últimos 18 meses el grupo desembarcó en la gerencia de UCM.
Grupo Falk es una compañía global de emergencia y servicios de rescate con más de 100 años de historia en el mundo y es el principal operador de ambulancias y servicios de emergencia extrahospitalario que hay a nivel global.
Obviamente, ser parte de la compañía líder a nivel mundial implica operar con los más altos estándares de calidad en todas las áreas de la empresa. Es un diferencial enorme con todas las empresas de plaza.
Por otra parte, si bien esto trae muchas ventajas competitivas, supone también desafíos a nivel interno, porque implica modificar procesos, políticas y cómo se encaran ciertas cosas no solo a nivel asistencial, también de finanzas y recursos humanos, entre otras.
De alguna forma estamos pasando por una etapa de multinacionalizar la compañía.
Una compañía que era típicamente uruguaya está pasando a operar con las mejores prácticas a nivel mundial y esa transformación implica un proceso de cambio natural.
Creo que estamos ante la etapa más importante de la historia de UCM.
En 2024 cumplen 45 años, ¿cómo está hoy la empresa luego de casi medio siglo de historia?
Estoy convencido de que Uruguay tiene uno de los mejores servicios de emergencia médica del mundo y eso es, en parte, gracias a que hace 45 años un grupo de pioneros, de médicos cracs, revolucionó la atención médica de emergencia al fundar UCM.
A lo largo del tiempo han sido muchísimos los hitos de la empresa pero, sin duda, la asociación con el Grupo Falck es el más importante en la historia de UCM, porque se suma al valor del servicio médico y asistencial que ya ofrecía, con unas capacidades estratégicas que serían imposibles de lograr si no fueras parte de una red global.
¿Cuáles son los grandes proyectos o planes para el corto y mediano plazo?
Nos trazamos tres grandes objetivos para el éxito de la compañía. El primero es la excelencia operativa. Este va a ser el foco de acá a cinco años. El segundo punto es todo lo que tiene que ver con el foco en el cliente y, el tercero, hace a la inversión.
Estamos haciendo inversiones récord para nuestro mercado. Invertimos fuerte en equipamiento, tecnología y capacitación.
Sabemos que hacemos una gran diferencia a la hora de salvar vidas y por eso estamos anclados en seguir invirtiendo en la operación.
¿Qué tendencias están pisando fuerte en el sector a nivel mundial y cómo las está acompañando UCM?
La primera es la telemedicina, que ganó mucha importancia en todo lo que es la atención médica. Esto hace la diferencia en casos que no son críticos y, sobre todo, en poblaciones que están alejadas de centros poblados.
Ahí estamos invirtiendo cifras récord en nuestro mercado en cuanto a equipamiento y tecnología para ofrecer este servicio y que sea continuo.
Luego tenemos una segunda tendencia que tiene que ver con incorporar cada vez más equipamiento tecnológico a nuestras ambulancias y a nuestros móviles en la medida que los equipos médicos se vuelven cada vez más monitorizados.
Una tercera tendencia tiene que ver con datos en tiempo real y análisis predictivos, que nos permiten anticipar patrones, optimizar la distribución de recursos y mejorar la planificación estratégica. Aquí también estamos realizando una inversión fuerte.
Esto es lo que estamos trabajando en UCM hoy. Después hay dos tendencias o tecnologías que está trabajando Falk a nivel mundial, en las que de alguna forma nosotros nos apalancamos, y esperamos aplicarlas en Uruguay en el mediano plazo.
La primera tiene que ver con la inteligencia artificial. Falk a nivel global está en etapa de desarrollo de proyectos que nos van a permitir mejorar la eficiencia de las operaciones.
A su vez, trabaja también en la realización de pruebas de logística con drones.
Esto implica trasladar muestras de sangre, medicamentos y desfibriladores, por ejemplo, a aquellos lugares con muy poca accesibilidad.
¿Cuáles son los planes de crecimiento que tiene hoy UCM Falk?
Hoy estamos planificando la ampliación de la empresa hacia el interior del país. Allí la salud en general tiene una oportunidad muy importante.
Estamos lanzando en la ciudad de Pando, y esto supone cambiar las reglas de juego de las emergencias médicas en Uruguay, donde las empresas tienden a ser muy locales, tanto en Montevideo como en las ciudades del interior, porque los costos de operar una base de salida son muy altos.
En el plan estratégico tenemos mapeadas otras cuatro ciudades clave -no las puedo adelantar aún- a las que estamos pensando llegar en el corto plazo.
¿Cómo está posicionada UCM hoy frente a la competencia?
Competimos bajo la lógica de seguir consolidando el liderazgo de UCM en el sector. La competencia en Uruguay en lo que refiere a emergencias médicas es muy fuerte.
En Montevideo tenemos seis empresas de emergencias médico móvil; es un mercado muy fragmentado y saturado. En la capital aproximadamente el 85% de la población objetivo tiene algún tipo de servicio de emergencia médico móvil.
Nosotros tenemos hoy planes muy ambiciosos en lo comercial para seguir ganando participación de mercado. De hecho, estamos duplicando la plantilla de vendedores.
También tenemos planes más estratégicos que tienen que ver con la evolución hacia nuevos modelos de negocios y nuevos servicios que podamos ofrecer. Hoy básicamente somos una compañía mono servicio y queremos empezar a diversificar, a partir del core de nuestro negocio.
Estamos evaluando dar mayor valor agregado a los servicios que ofrecemos e ingresar en cinco nuevos segmentos de mercado que de aquí a un año van a ser una realidad. Estamos cambiando las reglas del juego para la empresa y la industria de emergencia médico móvil en Uruguay.
Fotos: Diego Olivera
*Este artículo fue publicado originalmente en Forbes UY del mes de Junio de 2024