Mercedes Basavilbaso, apasionada por las matemáticas y la tecnología desde joven, inició su carrera en ingeniería informática. A pesar de trabajar en el sector bancario y en una consultora internacional, buscaba algo más. Optó por una startup, lideró equipos en Praga, República Checa, en una compañía de sistemas y conoció gente con ganas de cambiar paradigmas. Al regresar a la Argentina, descubrió Salesforce al implementar un CRM para una fundación. Cofundó Vurpix antes de establecer Wolke en 2019, una empresa de tecnología centrada en la implementación de Salesforce en América Latina.

Ser implementadores de soluciones de Salesforce implica que estén siempre incorporando nuevos conocimientos tecnológicos debido a que es una de las empresas más innovadoras que hay en software. Desde Wolke además, innovan en la forma de implementar, sumando valor a través de la mirada humana que pueden aportar a la transformación digital. "Nuestro sello personal es la capacidad de escucha, comprensión y adaptación a las dinámicas del cliente porque buscamos traducir sus necesidades en herramientas para que puedan hacer crecer su negocio y optimizar la gestión del día a día, haciéndolo más ordenado y fácil", explica Mercedes Basavilbaso, fundadora y CEO de Wolke.

Ser mujer emprendiendo en tecnología

Uno de los desafíos más grandes es el mindset arraigado y la educación recibida en la niñez durante una generación que refuerza estereotipos que, a pesar de los esfuerzos, siguen operando de forma inconsciente. 

"Aunque la sociedad ha avanzado en no verbalizar limitaciones para las mujeres, persiste en el inconsciente colectivo la duda sobre si la mujer va a poder llegar lejos, si podrá alcanzar ciertos logros o si será capaz. A veces esta duda es interna, el famoso síndrome del impostor, pero muchas veces también se percibe en el entorno", opina Basavilbaso y añade: "La experiencia confirma que las mujeres en tecnología deben esforzarse más y estudiar en mayor medida para ser tomadas en serio, ya que la industria ha sido históricamente dominada por hombres".

Basavilbaso realiza su aporte desde el rol que tiene hoy en el ecosistema de la tecnología. Trabaja explorando alianzas con organizaciones de género que trabajan en IT como Chicas en Tecnología o Lean In y también a través del mentoreo individual, dando orientación para aquellas que no tienen experiencia en el campo. "Me esfuerzo por desmitificar la tecnología, alentar a las personas a superar el miedo inicial y destacar la accesibilidad del aprendizaje en este campo", destaca. Además, busca ejercer liderazgo demostrando que las mujeres pueden tener éxito en roles tecnológicos. Aunque busca equidad en la selección de talento, reconoce el desafío de atraer más mujeres al equipo y está comprometida en seguir trabajando en esto.

El presente y futuro de Wolke

La empresa ya logró trabajar en más de 120 proyectos en cuatro años con más de 60 clientes de todos los rubros tanto multinacionales como nacionales de diversas industrias, en Argentina, Chile, Perú, Colombia, Ecuador y México. Algunos de sus clientes son Telecom (Vurpix), Galicia, Whirlpool, Softies, ICANA, SKF, Cetrogar, AA2000, Iamsa (Chile)

"Uno de los más destacados y apasionantes que hemos llevado a cabo, fue la automatización y gestión del soporte posventa para una multinacional de electrodomésticos. En este proyecto, la empresa que cuenta con talleres externos para reparaciones, logramos una automatización del 100%, desde la identificación del taller disponible hasta la asociación automática entre cliente y taller, incluso segmentando la Capital Federal por manzanas para una gestión más detallada", indica Basavilbaso. 

Con el proyecto, desarrollaron portales que permiten una comunicación directa entre la empresa y los talleres, simplificando el proceso de reparación, garantía y gestión de productos. Además, implementaron un sistema que permite a los talleres externos obtener la firma electrónica del cliente para confirmar la reparación de manera eficiente y cerrar el circuito de servicio de manera integral. Este desarrollo no solo optimizó la operación interna, sino que también mejoró significativamente la experiencia del cliente y del taller externo.

La startup es partner nivel Crest de Salesforce y, como consecuencia, sus planes de expansión están alineados con su estrategia de negocios. Si bien desde un inicio se enfocaron en Argentina, Chile, Perú y Colombia, donde tienen una fuerte presencia, hoy buscan ampliar su presencia en México, considerando ciertos factores que son ventajas competitivas como la solidez económica, el idioma, la zona horaria, la idiosincrasia y el crecimiento económico del país, con un paso hacia una expansión más global y presencial.

En lo más arriba del ranking

Salesforce mide a Wolke en términos de ventas, satisfacción del cliente y certificaciones del equipo. Por eso, para continuar la escalada en el perfeccionamiento, la empresa capacita de manera constante al equipo y proporciona tiempo para que los profesionales se especialicen, rindan y obtengan las certificaciones. Sobre la satisfacción del cliente, Salesforce evalúa directamente las encuestas enviadas al cliente, asegurando una evaluación imparcial. 

"La impronta humana, dinámica y flexible que promovemos en Wolke se vive a diario puertas adentro y puertas afuera, en el vínculo con el cliente. Tenemos el orgullo de contar con una calificación 4,93 sobre 5 en Salesforce y ser reconocidos en el mercado sobre todo por la calidez de nuestros equipos que logran amalgamarse, haciendo que los proyectos fluyan", destaca Basavilbaso.