Brian Klahr es argentino y, cuando tenía 21 años, vio una oportunidad de negocio. Era 2010 y las cuponeras vivían tiempos de esplendor. Pero este joven que por entonces estudiaba Administración de Empresas en la Ucema, junto a su amigo y socio Agustín Perelman, estaba seguro de que podía ir por más. Juntos crearon Cuponstar, una plataforma de beneficios corporativos que hoy es utilizada por más de 850 empresas en 6 países.
La compañía, entre cuyos clientes hay pymes de apenas 14 empleados a grandes firmas con 50.000, atraviesa un proceso de rebranding y, como parte de un camino que se inició hace tres años, recientemente anunció su cambio de marca: Bonda. Así lo confirmó hoy Klahr, también miembro de la junta directiva de Entrepreneurs' Organization (EO), organización global sin fines de lucro para Jóvenes Emprendedores, en el marco de una charla con Forbes.
Tal como destacan desde la organización, los beneficios siguen siendo el alma del negocio, pero desde hace algunos años se especializaron en brindarlos para pequeñas, medianas y grandes empresas que buscan acompañar a sus colaboradores de distintas maneras. La plataforma yo ofrece solo cupones de descuentos, sino que además brinda un portfolio de más de 2.500 beneficios en gastronomía, compras, capacitaciones, turismo, gimnasios, cines, entre otros, e incluye programas de Reconocimientos, Wellness, workshops online, y módulos complementarios de comunicación interna.
Bonda, sostienen desde la empresa, es el reflejo de una marca que se transformó y que tiene como propósito ser puente entre compañías y colaboradores. “Viene de 'bonding', de un unir, de vincular. Sentíamos que el otro nombre ya no nos representaba del todo, dado que nuestro foco hoy son los beneficios corporativos”, comparte Klahr. Bonda surge de la adaptación de la palabra bond, que en inglés significa lazo pero también bono. “Clientes y colaboradores ya no encuentran satisfacción únicamente en el salario, productos o servicios percibidos sino que entran en juego otros factores que obligan a las compañías a buscar nuevas soluciones para la retención del talento y la fidelización de sus clientes”, agregan desde la firma.
La compañía opera en la Argentina (donde hoy concentra el 60% de sus ingresos y donde están basados 85 de sus 92 colaboradores), pero también en Uruguay, Chile, Colombia, Perú y México. En medio de con contexto local complejo, marcado por la incertidumbre en la previa a las elecciones presidenciales, Klahr no deja de planificar. El objetivo para 2024 sería sumar 400 nuevos clientes en la Argentina y fortalecer las operaciones en la región, en especial en México y Colombia. Entre sus clientes, se encuentran firmas como IBM, JP Morgan, BBVA, H&M, Arcos Dorados, Techint, Danone y Sony, entre otros.
A futuro, no descarta abrir nuevos mercados y sueña con poner pie en Ecuador, Panamá y, por qué no, más adelante, también en Brasil y Estados Unidos.