La transformación de la matriz energética uruguaya cumplió un nuevo hito. El 16 de mayo el Ministerio de Industria Energía y Minería (MIEM) adjudicó la concreción del primer proyecto piloto para el desarrollo del hidrógeno verde (H2U) al consorcio conformado por las empresas Saceem y CIR.
Este proceso se enmarca en las metas de descarbonización para 2050 establecidas a nivel global respecto a las fuentes de energía utilizadas como al uso de materias primas en diversos procesos industriales. Para cumplir con el objetivo de reducir al menos 1,5º C el calentamiento global, el mundo debe ser carbono neutral para ese año.
El proyecto H24U (de Saceem y CIR) fue seleccionado por el Fondo Sectorial de Hidrógeno Verde para recibir apoyo económico para la implementación del primer emprendimiento comercial de transporte de carga que utilizará al hidrógeno verde como energético.
El fondo es llevado adelante por el Ministerio de Industria Energía y Minería (MIEM), el Laboratorio Tecnológico del Uruguay (LATU) y la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII), con el cometido de financiar proyectos de investigación, innovación y formación en hidrógeno verde.
El director Comercial de Saceem, Matías Saiz, explicó a Forbes que como el llamado exigencia de “experiencia probada y manejo del hidrógeno”, la firma Air Liquide integra el proyecto como partner tecnológico para ingeniería, suministros y operación de la cadena de valor de las moléculas de hidrógeno.
Saceem está presente en Uruguay desde 1951 y ha participado en diversos proyectos de infraestructura del país y la región. De hecho, tiene una unidad que se aboca específicamente a proyectos energéticos.
Por ejemplo, fue parte del proceso de montaje de la central térmica Batlle de UTE en 1951, de la cual hoy una parte se está desmantelando, así como en distintas obras de alta tensión, subestaciones, centrales hidroeléctricas, plantas fotovoltaicas, parques eólicos, centrales a ciclo combinado (Punta del Tigre), entre otras.
“Desde hace unos años en nuestra área de Desarrollo de Negocios comenzamos a ver qué era lo que se venía en materia energética a futuro. Ahí surgió el interés por el hidrógeno verde”, comenta el ejecutivo.
Saiz recordó que el transporte representa el 28% del consumo final de energía de Uruguay y genera el 65% de las emisiones de CO2. Y el transporte pesado representa un 70%.
“Intentar buscar una solución para el transporte pesado tendría un impacto muy grande en las emisiones globales del país”, asegura el ejecutivo.
El piloto tendrá como objetivo “explorar” la tecnología del hidrógeno verde como combustible no contaminante para luego escalarlo.
EL PROYECTO
El proyecto tiene tres grandes componentes. Una planta de producción de energía eléctrica renovable (fotovoltaica), una planta de producción de hidrógeno verde, y la incorporación de 17 camiones forestales que funcionarán en base a ese combustible en lugar de gasoil (fuel cell electric vehicles) con una inversión prevista de US$ 43,5 millones. El proyecto piloto se montará en Pueblo Centenario, zona donde está localizada la segunda planta de celulosa de UPM. El consorcio tendrá a cargo el diseño, financiamiento, construcción, operación y mantenimiento de toda la infraestructura necesaria para el proyecto. La planta fotovoltaica tendrá una potencia instalada de 11 MWp, cuya producción anual será de 21 GWh.
El costo producción de esta energía se estimó en US$/MWh 45 durante la vida útil de parque, bastante más competitivo de lo que saldría conectarse a la red de UTE.
“El principal costo variable de este proyecto es la energía eléctrica. De ahí la importancia de tener un precio competitivo para la producción de hidrógeno”, explica Saiz.
La planta de hidrógeno consiste en un electrolizador de 5 MW, una sala de compresores, una estación de carga de hidrógeno (HRS) y servicios auxiliares.
Actualmente, el piloto está en su primera etapa de ingeniería de detalle y cierre de contratos. El cronograma trazado establece que para julio de 2025 ingresaría a Uruguay el primero de los 17 camiones a hidrógeno verde del proyecto.
Los desarrolladores invertirán US$ 43 millones en la planta de generación, la planta de hidrógeno y los 17 camiones. La vida útil de los camiones será de unos cinco años, asumiendo que en ese período recorran 1 millón de kilómetros, a razón de unos 700 km diarios. Por eso, a mitad del piloto habrá un reemplazo total de la flota.
Un camión de hidrógeno verde tiene hoy en el mercado un tamaño muy similar a uno estándar a gasoil. Como toda tecnología en pleno desarrollo, su costo es elevado. La inversión en este tipo de vehículos se ubica entre US$ 500.000 hasta US$ 1 millón, es decir, cinco veces más que un camión a combustión.
“La tecnología no está aún masificada, los costos son altos, y por eso se requieren subsidios”, dice Saiz.
La iniciativa de Saceem y CIR accederá a un fondo de US$ 10 millones no reembolsables, a otorgar en un período de 10 años, para desarrollar un proyecto que incorporará la tecnología de desarrollo y producción del hidrógeno verde en distintas dimensiones y áreas productivas, según el MIEM. El consorcio tendrá ahora una tarea de homologación en los distintos organismos públicos para que esos camiones están habilitados para circular por el país.
Sobre la financiación del piloto, el director de Saceem asegura que hay “mucho apetito de la banca comercial” para financiarlo, por lo que no cree que sea un escollo. “Vamos a tener que trabajar fuerte en la estructuración para que sea un proyecto viable”, enfatiza.
Saiz define al proyecto piloto como “holístico” porque abarca todos los eslabones, desde la autonegación de energía, producción de hidrógeno, una estación de recarga, y los camiones.
El consorcio no solo piensa en el transporte de carga para optimizar y viabilizar la producción de hidrógeno verde con su piloto, sino que también hay posibilidades de inyectar ese combustible en las redes de gas natural o utilizarlo para otros usos comerciales.
Precisamente, en etapas posteriores, en conjunto con la empresa Conecta, el proyecto podría inyectar hidrógeno verde en la red existente de gas natural de Paysandú. “Esta iniciativa sería un primer piloto que permitirá evaluar su posterior incorporación en mayor escala en la progresiva descarbonización de las redes de gas natural”, indicó el MIEM.
*Este artículo fue publicado en Forbes Uruguay del mes de Julio de 2023.