El expresidente de Estados Unidos Donald Trump presentó en las últimas horas su primera declaración financiera tras dejar la Casa Blanca, un reporte que revela grandes ganancias obtenidas gracias a rubros tan diversos como una serie de tarjetas comerciales digitales o desarrollos inmobiliarios fuera de su país, informaron hoy medios locales.
El informe de 101 páginas, que le fue solicitado como candidato aspirante a un nuevo mandato en las presidenciales de 2024, retira parcialmente el velo de los negocios del magnate inmobiliario, un tema en el que es extremadamente reservado.
El expresidente ganó de 100.000 a un millón de dólares con sus tarjetas comerciales digitales NFT -que costaban 99 dólares- y que muestran a Trump en varias facetas incluyendo la de cowboy, astronauta y piloto de combate.
También ganó más de cinco millones de sus compromisos como conferencista, que administra la empresa CIC Ventures, de acuerdo con el informe.
En tanto, Trump reportó que no ganó más de 200 dólares de la compañía Trump Media & Technology Group, matriz de su plataforma Truth Social.
El expresidente posee el 90% de la compañía, por la cual reportó un valor de entre 5 y 25 millones de dólares.
El documento también revela información sobre negocios de Trump en el exterior, como un proyecto de desarrollo inmobiliario y de golf por valor de 4.000 millones de dólares, en Omán, en asociación con una compañía saudita.
También registró beneficios por más de cinco millones de dólares de derechos comerciales de una entidad llamada "DT Marks Oman", consignó la agencia de noticias AFP.
A diferencia de todos los presidentes desde 1970, el republicano se rehusó a publicar su declaración de impuestos mientras estuvo en el cargo y acudió a la justicia para bloquear la solicitud del Congreso.
Cuando los legisladores estadounidenses finalmente publicaron en diciembre -contra la voluntad de Trump- sus declaraciones de 2015 a 2020, los documentos mostraron que pese a reportar millones en ganancias, a menudo el expresidente pagó menos en impuestos al alegar grandes pérdidas empresariales.
El juez de origen colombiano Juan Merchán le leyó allí los cargos relacionados con falsificación de registros comerciales en el pago de 130.000 dólares a la estrella porno Stormy Daniels en la recta final de la campaña electoral de 2016, con el fin de que ella mantuviera en secreto una supuesta relación extramarital ocurrida 10 años antes y que él siempre negó.
Su entonces abogado Michael Cohen fue el encargado de hacer el pago y el magnate le reembolsó la suma fraccionada, haciéndola pasar presuntamente como minutas profesionales, de acuerdo a la acusación.
El expresidente, que aspira a volver a la Casa Blanca en las elecciones de 2024, calificó el caso de "ridículo".
El magnate expresó esta semana que no piensa retirar su candidatura a los comicios del próximo año, aunque sea condenado por los cargos penales presentados en su contra.
El problema Cohen
Donald Trump y su antiguo abogado, Michael Cohen, han estado en guerra en público, discutiendo en las redes sociales, en las noticias por cable y en los tribunales , donde el expresidente demandó recientemente a Cohen por 500 millones de dólares. Sin embargo, fuera del ojo público, sus equipos han estado participando en conversaciones para llegar a un acuerdo.
No van a hacer las paces con todo. Pero parecen estar acercándose a un terreno común en un caso que tiene su origen a mediados de 2017, cuando Cohen dice que llegó a un acuerdo con la Organización Trump para que la firma cubriera sus honorarios legales en relación con las investigaciones sobre las elecciones y demandas de 2016. presentada por Stormy Daniels y Karen McDougal, dos mujeres que han afirmado haber tenido aventuras con Trump.
En abril de 2018, el FBI registró la oficina de Cohen. Poco después, dice, la Organización Trump dejó de pagar sus facturas legales.
En marzo de 2019, Cohen demandó a la Organización Trump en la Corte Suprema del estado de Nueva York, alegando que la empresa no había cumplido con su acuerdo contractual y solicitando un reembolso de 3,8 millones de dólares por sus honorarios legales y otros costos. El juez desestimó la demanda en noviembre de 2021 y encontró que “los honorarios legales de Cohen surgen de su servicio (a veces ilegal) al Sr. Trump personalmente, a la campaña del Sr. Trump y a la Fundación Trump, pero no de su servicio al negocio. de la Organización Trump, que es el único acusado en este caso”.
Cohen apeló . La corte de apelaciones dictaminó en noviembre pasado, en una decisión de 5-0, que el juez de primera instancia había cometido un error al desestimar el caso. Eso envió a las partes de vuelta a la mesa de negociaciones . En marzo, las dos partes informaron al tribunal que "se reunieron y consultaron sobre un camino de acuerdo preferido y solicitaron proceder a una conferencia de acuerdo obligatoria a través de una mediación privada".
Cuando se le preguntó sobre todo esto, Cohen dirigió las consultas a su abogado, quien no respondió. Los representantes de la Organización Trump tampoco respondieron a las solicitudes de comentarios.
