Desarrollar un plan de negocios exitoso que respalde tu estilo de vida deseado requiere un enfoque reflexivo e intencional, pero no tiene que ser difícil o demasiado complicado. En menos de cinco años, hice crecer una práctica de derecho de defensa criminal de la nada a generar más de siete cifras. En ese tiempo, aprendí que la clave del éxito radica en determinar dónde querés que esté tu vida personal y trabajar hacia atrás para identificar qué se debe hacer en tu empresa para llegar ahí.
1. Comenzá con tu visión personal
El primer paso es crear una visión de cómo querés que sea tu vida personal a corto y largo plazo. Escribí tus metas para un año, tres años, cinco años y diez años. Esto incluye determinar qué tipo de estilo de vida deseás vivir y los recursos financieros necesarios para hacerlo realidad. Considerá tus metas y aspiraciones personales, como ser propietario de una casa, viajar o formar una familia, y adjuntá cifras financieras a cada una de estas metas.
Esto te dará una idea clara de lo que necesitás ganar para lograr el estilo de vida deseado. Asigná montos monetarios específicos a cada objetivo que tengas y dividilos en los montos de pago mensuales requeridos. Sumá esos pagos para el mes y luego tendrás tu ingreso mensual personal.
2. Trabajá hacia atrás para determinar los objetivos comerciales
Una vez que tengas una comprensión clara de tus objetivos financieros personales, es hora de trabajar hacia atrás para determinar qué debe lograr tu empresa para respaldar esos objetivos. Mirá el porcentaje de ingresos brutos que actualmente obtenés personalmente de la empresa. Usá ese número para extrapolar, usando el mismo porcentaje de propietario, cuáles deben ser los ingresos de la empresa para lograr tu ingreso personal deseado anual y mensualmente.
A partir de ahí, desglosá el objetivo financiero anual de tu empresa en objetivos mensuales, semanales e incluso diarios. El uso de herramientas como hojas de cálculo puede ayudarte a realizar un seguimiento de tu progreso y hacer los ajustes necesarios en el camino.
3. Determiná el valor de tu producto o servicio y los requisitos mensuales
Un aspecto crítico de construir un plan de negocios exitoso es determinar el valor de tu producto o servicio y luego determinar cuántos necesitás vender cada mes para alcanzar tus metas. Esto se puede lograr examinando el valor promedio por tipo de producto en tu empresa y cuántos de cada tipo de producto necesitarías vender para cumplir con tu requisito de ingresos mensuales.
Por ejemplo, para calcular los costos de mis servicios en mi práctica de defensa criminal, determiné las horas facturables requeridas para que cada miembro del personal trabajara en un caso, luego multipliqué eso por cinco para lograr cinco veces el retorno de la inversión, que cubrió el costo de producir el servicio, cubrió los gastos generales y de marketing y permitió una ganancia saludable.
4. Tené en cuenta las necesidades de marketing y personal
El marketing y la dotación de personal son dos consideraciones importantes al crear un plan de negocios exitoso. Determiná las estrategias de marketing que son más efectivas para tu negocio y asigná un presupuesto en consecuencia.
Una buena regla general es presupuestar para usar del 5% al 10% de tus ingresos brutos para marketing. Esto puede incluir invertir en marketing digital, contratar a un especialista en marketing o asistir a conferencias de la industria. Las necesidades de personal también deben evaluarse cuidadosamente para garantizar que cuentes con el equipo adecuado para lograr tus objetivos. Mirá los productos o servicios que calculaste anteriormente para determinar tus necesidades de personal y marketing.
5. Mantenete flexible y abierto al cambio
Finalmente, es importante permanecer flexible y abierto al cambio a medida que implementás tu plan de negocios. Como se vio anteriormente, hacer ajustes puede afectar tu número objetivo final. También podés proyectar un aumento gradual, ya que pasar de US$ 500 por mes a US$ 50.000 por mes es un salto sustancial y requerirá sistemas y procedimientos apropiados para administrar la carga de trabajo, sin mencionar los esfuerzos de marketing para generar el trabajo requerido.
Controlá tu progreso regularmente y estate dispuesto a hacer los ajustes necesarios. Esto puede incluir cambiar tus estrategias de marketing, ajustar los precios o contratar personal adicional sobre la marcha. Un plan de negocios exitoso es aquel que evoluciona constantemente para satisfacer las necesidades cambiantes de tu negocio y tu vida personal.
Al adoptar un enfoque reflexivo e intencional, podés lograr tus objetivos personales y profesionales y construir un negocio próspero que respalde el estilo de vida que deseás sin usar herramientas o productos sofisticados. Todo lo que necesitás es tu imaginación, una hoja de cálculo y tiempo para trazar el plan.
*Con información de Forbes US