Las marcas y la narración de historias van de la mano, así que tiene sentido que aprendamos de uno de los narradores más encantadores de todos los tiempos, el Dr. Seuss. Empresas como Mercedes Benz, McDonalds y Coca Cola han resistido el paso del tiempo gracias a sus firmas atemporales. Por otra parte, muchas marcas van y vienen, no porque no ofrecieran los productos y servicios adecuados, sino porque no aplicaron los principios necesarios para convertirse en atemporales. Dicho esto, he aquí algunos consejos del Dr. Seuss sobre cómo crear una marca divertida y atemporal.

1. Sé tú mismo

“Hoy eres tú, eso es más cierto que cierto. No hay nadie vivo que sea más tú que tú”. (Dr. Seuss)

No hay nada peor que una empresa o una marca personal que intenta replicar lo que ya existe. Es cierto que no hay nada nuevo bajo el sol y que todo se ha hecho antes. Sin embargo, puedes hacerla tuya añadiendo tu personalidad única. Abstente de modificar logotipos, eslóganes y contenidos de redes sociales. En los tiempos que corren, la gente no tiene miedo de llamarte la atención cuando se copia descaradamente a otra persona.

2. Mantén la sencillez

Sea cual sea el dilema que tus productos y servicios intentan resolver, haz que la solución sea sencilla. Supongamos que vendes aspiradoras para eliminar los pelos de gato de la ropa y del sofá. La gente va en masa a comprar la aspiradora, pero cuando abren la caja para leer las instrucciones, son demasiado complicadas y nadie sabe cómo funciona. ¿Y qué ocurre? La gente empieza a devolver la aspiradora y pide que le devuelvan el dinero. No caigas en esta trampa.

3) Todo el mundo es importante

“A veces las preguntas son complicadas y las respuestas sencillas”. (Dr. Seuss)

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Las empresas tienen la terrible costumbre de tratar mejor a los que más gastan que al resto. No hay nada malo en tener afán de lucro; al fin y al cabo, es necesario obtener beneficios para alcanzar los objetivos empresariales. Sin embargo, el cliente que hoy gasta veinte dólares puede acabar gastando miles la semana que viene. Por lo tanto, trata a todos por igual, si no lo haces, puedes perder algunos de tus mayores clientes en favor de tus competidores.

“Una persona es una persona, por pequeña que sea”. (Dr. Seuss)

4. Mantente informado

“Una persona es una persona, por pequeña que sea”. (Dr. Seuss)

A lo largo de los años, muchas empresas han quebrado porque no se mantuvieron al día de lo que ocurría en su sector. Se volvieron complacientes, cerraron los ojos y, cuando los abrieron, otra empresa ya había tomado el relevo y era demasiado tarde. Por ejemplo, Nokia fue la primera red de telefonía móvil del mundo, y pasó años como líder mundial del sector. Pero no vieron venir Android, y para cuando empezaron a desarrollar su propia marca de teléfonos Android, sus clientes se habían olvidado de ellos, y no podían competir en el mercado.

5. Cumple lo que prometes

Según la Oficina del Censo, en 2020 se crearon más de 4,4 millones de empresas. En cierto modo, esto es algo bueno, pero por desgracia, hay demasiada gente sin experiencia creando empresas, y está causando mucho caos. Por ejemplo, el drop shipping se ha hecho muy popular, pero no es tan fácil como se cree. El resultado es que las empresas prometen demasiado y cumplen poco, y los consumidores salen perdiendo. 

“Cuanto más leas, más cosas sabrás. Cuanto más aprendas. A más lugares irás”. (Dr. Seuss)

Ser novato no tiene nada de malo, porque todo el mundo tiene que empezar por algún sitio. Pero no todo el mundo puede ser un experto, así que lo mejor es informar a los clientes y posibles clientes de que acabamos de empezar y disculparnos de antemano si hay algún contratiempo o retraso. En otras palabras, abstente de hacer cosas como prometer la entrega al día siguiente cuando existe la posibilidad de que el paquete tarde tres semanas.

Recuerda que ser atemporal no significa no evolucionar. Otro elemento de una marca atemporal es la evolución. El mundo cambia a una velocidad vertiginosa y, si no sigues el ritmo, perderás a tu público. Cada día surgen nuevas marcas y, con Internet y las redes sociales, los consumidores tienen acceso a un flujo continuo de información. Sin embargo, si sigues siendo relevante y escuchas a tus clientes, nunca perderás a tu público.

*Publicada originalmente en Forbes US