Barbara Frei, a vicepresidenta Ejecutiva de automatización industrial y Miembro del Comité Ejecutivo de Schneider Electric, visitó la Argentina y disertó sobre la fabricación sostenible y el papel fundamental de las tecnologías de la Industria 4.0.
Frei se incorporó a Schneider Electric en 2016 como presidenta nacional para Alemania y en 2017 amplió su alcance hasta convertirse en presidenta de la zona que incluye Alemania, Austria y Suiza. En 2019, fue nombrada Vicepresidenta Ejecutiva de Operaciones en Europa y miembro del Comité Ejecutivo.
El 5 de diciembre, la ejecutiva fue una de las oradoras que formó parte de la 19th Global Conference on Sustainable Manufacturing (GCSM), que se llevó a cabo en el ITBA, encuentro que reúne a académicos, investigadores y especialistas de universidades, institutos de investigación e industrias de todo el mundo que trabajan en temas relacionados con la fabricación sostenible.
En dicho espacio, Frei planteó que las tecnologías y soluciones de fabricación avanzada desempeñan un papel crucial para permitir una transformación y un crecimiento empresarial responsable, sostenible e inclusivo y, sin embargo, menos del 30% de las operaciones industriales han implementado con éxito un programa de transformación digital a escala. En este sentido, desde su mirada, el potencial de mejora es sorprendente, pero son las personas quienes tienen el poder de transformación.
La sostenibilidad del sector industrial en América Latina
Los acontecimientos mundiales de los últimos años han sido una llamada de atención para todos los sectores, obligando a empresas y gobiernos a hacer frente a una crisis energética y a la creciente preocupación por el cambio climático. Esta llamada a la acción es especialmente urgente para el sector industrial, que representa el 40% del consumo mundial de energía y el 32% de las emisiones de carbono. De esta forma, sentenció Frei, para garantizar un futuro más resistente, es esencial que el sector industrial reduzca las emisiones y dé prioridad a la eficiencia energética.
En este contexto, compartió que, mediante el uso de tecnologías avanzadas, como la inteligencia artificial (IA) y la automatización inteligente, este sector puede obtener información valiosa sobre las operaciones para avanzar en prácticas más sostenibles.
En lo que respecta a América Latina, la ejecutiva comentó que se trata de una región sumamente estratégica para nosotros. Por ello, recientemente anunciamos la expansión de nuestra unidad de Sustainability Business, responsable de los servicios de consultoría en sostenibilidad, criterios ESG, descarbonización y gestión energética, que duplicará sus operaciones en los países latinoamericanos con foco en las principales industrias y empresas de diferentes sectores. Por esta razón, estamos ampliando nuestro equipo con la contratación de expertos en sostenibilidad corporativa, soluciones sostenibles y gestión de la energía.
En cuanto a los retos a los que se enfrenta actualmente el sector industrial en el mundo, Frei manifestó: Vivimos en un mundo impulsado por la industria. Sin embargo, la industria también es responsable del 32% de las emisiones mundiales de carbono. En este sentido, la digitalización y la electrificación ofrecen increíbles oportunidades de mejora, pero solo el 26% de todas las empresas industriales del mundo están aprovechando los beneficios de la transformación digital a escala. Esto significa que el desafío principal de la mayor parte de la industria se centra en mejorar la productividad, la resiliencia, la rentabilidad y la sostenibilidad mediante la interacción del software con la automatización y la energía.
Tradicionalmente, se ha culpado a las empresas industriales del cambio climático, la escasez de recursos y los perjuicios para el medio ambiente y la sociedad que las rodea, y con razón, sostuvo la ejecutiva. Sin embargo, siguió: Los sectores industriales desempeñan un papel masivo en la crisis climática, y existe la increíble oportunidad de descarbonización y optimización en este espacio, por lo que las industrias del futuro tienen un papel crucial que desempeñar a la hora de abrazar los esfuerzos globales de sostenibilidad.
Los cambios más urgentes
Desde la mirada de Frei, para avanzar en el camino hacia la sostenibilidad industrial, es esencial garantizar la interacción del software con la automatización y la energía. Así, todos los procesos que no estén en consonancia con estas cuestiones tendrán que quedar obsoletos.
En línea con ello, siguió: Un mundo más eléctrico y digital es clave para abordar la crisis climática de forma urgente. En Schneider Electric, y junto con nuestros clientes, estamos construyendo el Nuevo Mundo Eléctrico proporcionando energía inteligente en todas partes, en nuestros hogares, edificios, centros de datos, industrias, infraestructuras y redes. Discutimos mucho sobre el suministro de energía, pero debemos recordar que más del 50% de las emisiones de CO2 se reducirán desde el lado de la demanda. Sólo el 45% procede de la oferta.
¿Por qué? Porque nuestro mundo está lleno de ineficiencia y despilfarro en todos los sistemas, detalló. Teniendo en cuenta que el 60% de la energía se pierde o se desperdicia, debemos admitir que la forma en que utilizamos la energía hoy en día es ineficiente. Por ejemplo, los motores son el núcleo de todas las operaciones industriales. Por término medio, consumen entre el 60 y el 95% de la energía eléctrica de una planta. Por lo tanto, incluso el más mínimo aumento de la eficiencia de los procesos, las operaciones o los motores se traduce en grandes beneficios: mayor productividad, sostenibilidad y fiabilidad.
Tecnología y personas
La transformación digital tiene más que ver con las personas que con la tecnología, asegura la vocera. La tecnología y el software existen para aumentar y mejorar las capacidades humanas y la seguridad. Mejoran fundamentalmente la forma en que trabajamos y el tipo de trabajo que hacemos.
Además, amplió: Las tecnologías avanzadas aportan visibilidad al despilfarro de energía y al uso de recursos gracias a la conectividad a escala: la potencia informática en los bordes combinada con la nube aporta contextualización de datos para ofrecer información, que puede convertirse en decisiones y acciones a través de la gestión y la automatización. De esta forma, los datos se convierten en información valiosa sólo cuando se contextualizan, lo que le permite a las personas comprender, actuar y automatizar.
Por su parte, la inteligencia artificial tiene el potencial de transformar las industrias y ayudar a desbloquear la eficiencia y la sostenibilidad. En Schneider Electric combinamos nuestra larga experiencia en fabricación y dominio con la innovación de vanguardia en IA, aprendizaje automático y aprendizaje profundo para potenciar una toma de decisiones más inteligente, la agilidad y la descarbonización, detalló. Por ejemplo, hoy en día se obtienen claros beneficios relacionados con la resiliencia de la cadena de suministro. La IA ayuda a proporcionar una planificación precisa de la producción gracias a la previsión optimizada de la demanda de los clientes y la gestión de los proveedores.
Además, complementó: La IA aumenta las capacidades humanas. Con su capacidad para captar conocimientos y experiencia, puede aumentar significativamente las capacidades humanas en las industrias. Simplifica las tareas complejas, contextualiza los datos para mejorar la toma de decisiones y encapsula una gran base de conocimientos.
Sin embargo, reforzó la idea de que la clave para liberar todo el potencial de la IA está en la intersección de la tecnología y la experiencia humana. Una implementación exitosa de la IA requiere no sólo un enfoque de ciencia de datos, sino también una perspectiva centrada en la industria para desarrollar algoritmos éticos e imparciales que se alineen con los objetivos empresariales. Los seres humanos impulsan industrias de todo tipo, aportando habilidades insustituibles como el juicio, el razonamiento y la imaginación. Con un software intuitivo, agnóstico e integral a su lado, no hay límites a lo que los trabajadores industriales pueden lograr.
El impacto de ser sostenible
La sostenibilidad es un facilitador, planteó Frei. Obliga a una organización a ser ágil e innovadora, lo que conduce a la resiliencia y la rentabilidad responsable. En este sentido, combinar el poder de la digitalización con las prácticas de gestión potenciará el impacto.
Según compartió, la sostenibilidad debe formar parte de los sistemas de rendimiento de cada empresa industrial impulsada por prácticas de mejora continua. Es por esto que, más allá del coste, lo que no puede permitirse es el coste operativo del derroche de energía.
A su vez, la incorporación de la sustentabilidad en la estrategia es esencial para cumplir con las expectativas de los inversores, la demanda de los consumidores y los requisitos normativos en constante evolución. Demostrar prácticas de sostenibilidad es bueno para el negocio, aseguró la vocera. Les da a las empresas una ventaja competitiva sumamente importante. Por ejemplo, si se desea trabajar con el FMI o con el Banco Mundial, acceder a créditos o atraer inversores, una empresa debe ser sostenible y tener un programa sólido de sustentabilidad que integre factores ambientales, sociales y de gobierno corporativo. Para las empresas y sus líderes no hay opción. El costo de no ser sostenible es demasiado alto.
Por último, la ejecutiva planteó que el camino hacia la sustentabilidad es, sin dudas, un desafío que requiere de energía para alcanzar consensos, y comprometer inversiones e involucrar a diversas partes interesadas. El esfuerzo vale la pena porque las organizaciones pueden ser parte de la solución. El punto de partida es replantearse en profundidad quiénes somos, qué hacemos y cómo lo haremos con dos principios como brújula: actuar bien para hacer el bien e implicar a todos los actores involucrados, especialmente a los Estados. Una empresa que prioriza el impacto positivo entiende que generar un triple impacto cuidando su desempeño financiero es una oportunidad para rendir, innovar y crecer. En el caso de Schneider Electric, el ESG está presente en nuestro propósito como empresa, en cómo hacemos negocios y en cómo nos relacionamos con todas nuestras partes interesadas. Esta integración ha sido uno de los factores más importante para el éxito de nuestra estrategia.