La ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, aseguró que el bono indexado a indicadores de cambio climático que emitió Uruguay en octubre de este año “es un ejemplo concreto del lineamiento de la sostenibilidad y la innovación” y demuestra “cómo se une la política ambiental con la política económica”.

Durante su intervención en “Test and Invest, Uruguay Business Summit”, evento organizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Arbeleche aseguró que “la emisión del bono no solo marca que el Gobierno está preocupado por el cuidado al medioambiente, sino que muestra que está con una mirada hacia adelante y se está anticipando”. 

En ese sentido, la ministra aseguró que Uruguay está “a la vanguardia” ya que busca lograr pasos concretos y alinear el compromiso del país con el cuidado ambiental. “Esto es solo el inicio”, expresó y agregó: “En este panorama incierto Uruguay se planta e internaliza los compromisos medioambientales”. 
 

“Para llegar a los objetivos se tienen que diseñar políticas que den las reglas y los incentivos correctos para que el sector público y privado los puedan lograr", indicó Arbeleche y aseguró que, por su parte, los organismos multilaterales deberían estar “dispuestos a dar créditos en donde la tasa de interés esté atada a los compromisos ambientales”. 

Características del bono

La ministra de Economía detalló algunas de las características del bono verde que lo posicionan como “un producto innovador”. “Es la primera vez que un país tiene una consecuencia por el cumplimiento o no de los compromisos ambientales que se asumieron en el Acuerdo de París en 2017”, expresó. 

La segunda característica, indicó, refiere a que se incluye la conservación de la naturaleza a través de la protección de los bosques nativos. “No solo estamos mirando los efectos de los gases de efecto invernadero, sino que también estamos mirando la biodiversidad, un elemento sumamente importante que los inversores ponían sobre la mesa”. 

“Así como Uruguay es un país libre de aftosa, también el ser libre de deforestación va a convertirse en un activo sumamente importante”, indicó.

Por otra parte, el pago de interés del bono está atado a compromisos ambientales concretos. En ese sentido, se estableció un diseño simétrico del pago del cupón, donde el interés va a ser mayor si Uruguay no llega a las metas elegidas, mientras que será menor si logra cumplirlas. "Esto quiere decir que el inversor estuvo dispuesto a aceptar un menor cupón por contribuir a un bien público como lo es el cuidado del ambiente”, expresó Arbeleche.

Finalmente, la cuarta característica es que habrá un proceso de verificación en el que el Programa de Desarrollo de las Naciones Unidas tendrá un rol fundamental ya que será el operador externo de las medidas. “Uruguay va a pasar a tener mediciones sobre la base anual y se verificará el año posterior”.