El bitcoin y las criptomonedas se vieron presionados por la actitud anti cripto de los reguladores y legisladores estadounidenses (uno de los cuales está creando un "ejército anti cripto"). El precio del bitcoin, a pesar de ver un repunte en 2023 que algunos creen que podría estar apenas comenzando, sigue bajando alrededor de un 60% desde sus máximos históricos de finales de 2021, mientras que Coinbase, la principal bolsa de criptomonedas que cotiza en EE.UU., se vio muy afectada por las violentas oscilaciones del precio del bitcoin y las crypto.
Ahora, el inversor de capital riesgo Chamath Palihapitiya, uno de los primeros inversores en bitcoin, quien afirma haber comprado bitcoin por primera vez en 2010, declaró que "las criptomonedas murieron en Estados Unidos", advirtiendo de que los reguladores van por las empresas de criptomonedas como Coinbase.
"Las criptomonedas están muertas en Estados Unidos", dijo Palihapitiya en el All-In Podcast, junto a sus compañeros inversores Jason Calacanis, David Sacks y David Friedberg, apuntando contra el presidente de la Comisión del Mercado de Valores (SEC), Gary Gensler, que culpó de la reciente crisis bancaria al bitcoin y al cripto. "Así que las autoridades de Estados Unidos apuntaron firmemente a las criptomonedas".
La semana pasada, Gensler vinculó la quiebra de Silvergate y Signature Bank a sus actividades con bitcoins y criptomonedas durante su testimonio ante un comité de servicios financieros de la Cámara de Representantes.
Los reguladores y legisladores de EE.UU. intensificaron su escrutinio de la industria y el mercado de las criptomonedas tras la implosión de la bolsa de criptomonedas FTX, con sede en Bahamas, en noviembre del año pasado, que causó conmoción en Washington DC, donde el fundador de FTX, Sam Bankman-Fried, se había convertido en un importante donante político.
La sed por una regulación
En enero, cuatro altos funcionarios estadounidenses de la administración Biden instaban al Congreso a "intensificar" los esfuerzos para regular el mercado de criptodivisas, calificando de “grave error promulgar una legislación que invierta el rumbo y profundice los lazos entre las criptodivisas y el sistema financiero más amplio”.
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"Coinbase cumplió las normas, se mantuvo en la cola, intentó hacer lo correcto", dijo Palihapitiya. "Parece que en cada paso del camino, desde la composición del consejo hasta la composición ejecutiva, pasando por cómo intentan interactuar con los reguladores, fueron probablemente los que más lejos estuvieron de obtener una licencia. La que más se acercó fue la más fraudulenta, FTX. ¿Cómo es posible?"
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Coinbase empezó a cotizar en Wall Street en la primavera de 2021, en plena escalada de los precios del bitcoin y las criptomonedas. Sin embargo, las acciones de Coinbase se desplomaron más de un 80% desde que salieron a bolsa en medio de la caída de precios, a veces llamada el invierno del bitcoin y las criptomonedas.
"Las empresas de criptomonedas son probablemente las que más amenazaban a la clase dirigente y las que, para ser justos con los reguladores, sobrepasaron los límites más que ningún otro sector de la economía emergente. Ahora están pagando las consecuencias. Les ha pasado factura", afirmó Palihapitiya.
La semana pasada, el director ejecutivo de Coinbase, Brian Armstrong, afirmó que la empresa de intercambio de bitcoins y criptomonedas con sede en San Francisco se plantearía abandonar Estados Unidos si no se aclara el entorno normativo del sector.
"Cualquier cosa está sobre la mesa, incluido el traslado o lo que sea necesario", dijo Armstrong durante una conferencia en Londres, fue reported por Coindesk.
"Creo que EE.UU. tiene potencial para ser un mercado importante para las criptomonedas, pero ahora mismo no estamos viendo esa claridad regulatoria que necesitamos", dijo. "Creo que dentro de unos años, si no vemos surgir esa claridad regulatoria en Estados Unidos, quizá tengamos que plantearnos invertir más en otras partes del mundo".
*Con información de Forbes US sobre crypto.
