¿Estás buscando poner en orden tus finanzas de cara al 2023 pero no sabés por dónde empezar? La planificación financiera personal puede parecer una tarea abrumadora, pero no tiene por qué serlo.
Hay varias estrategias simples que podés usar para tratar de encauzar tus finanzas y mejorar tu situación financiera. Ya sea que estés luchando con una deuda o simplemente buscando ahorrar más dinero, estas estrategias pueden ayudarte a alcanzar tus metas financieras.
Definí tus objetivos financieros
La planificación financiera es una parte importante de vivir una vida segura y plena. El primer paso para crear un plan financiero sólido para vos es definir tus metas financieras. Estas pueden variar desde objetivos a corto plazo, como ahorrar para un automóvil o vacaciones, hasta objetivos a largo plazo, como pagar deudas o establecer un fondo para la universidad de tu hijo.
Crear objetivos realistas es esencial, así que dividilos en partes más pequeñas y establecé puntos de referencia alcanzables en el camino que puedan mantenerte motivado.
Cuando hayas encontrado objetivos que tengan significado para vos, podés crear un presupuesto que establezca cómo y cuándo se cumplirán estos objetivos. Recordá siempre no extenderte demasiado: tratá de mantenerte dentro de tus límites al presupuestar y planificar.
Seguí tus gastos e ingresos
Administrar tus finanzas no es una tarea desafiante si tenés un enfoque organizado. Uno de los elementos esenciales de la gestión financiera es el seguimiento de tus gastos e ingresos. Es importante registrar cada centavo que entra y sale de tus cuentas, ya sea por un salario anual, trabajo adicional o por gastos incurridos como alquiler, facturas, etc. con información valiosa sobre dónde tomar mejores decisiones financieras en el futuro.
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Creá un presupuesto
Crear un presupuesto para vos puede ser una excelente manera de establecer un plan financiero. Saber cuánto dinero ingresa y qué debe salir cada mes te ayudará a administrar mejor tu dinero.
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Establecer un presupuesto requiere tiempo y esfuerzo, pero contar con uno puede brindarte la tranquilidad de saber que tus finanzas van por buen camino y que tus cuentas funcionan sin problemas. Para comenzar, hacé una lista de todas las fuentes de tus ingresos, ya sea de un trabajo u otras inversiones.
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Luego, determiná cuánto dinero necesitarás para ciertos gastos, como alimentos, servicios públicos, pagos de préstamos y otros costos, de modo que sepas cuánto podés ahorrar o gastar cada mes. Además, debés considerar establecer categorías factibles con metas correspondientes, como pagar deudas o ahorrar para la jubilación, de modo que estas metas se conviertan en objetivos realistas en lugar de sueños lejanos.
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Invertí en vos mismo tomando cursos y aprendiendo sobre planificación financiera
Invertir en vos mismo es una de las decisiones más importantes que podés tomar. Tomar cursos relacionados con las finanzas personales y la planificación financiera puede ayudarte a comprender mejor cómo administrar tu dinero, priorizar los ahorros, reducir las deudas, aumentar las inversiones y planificar la jubilación.
Aprender los componentes básicos financieros esenciales, como la elaboración de presupuestos, la gestión de deudas y los conceptos básicos de inversión, te permitirá desarrollar estrategias financieras sólidas que te servirán a lo largo de tu vida.
Mantené un fondo de emergencia para gastos inesperados
Es fundamental tener dinero a la mano para gastos inesperados que puedan surgir durante tu vida. Un fondo de emergencia puede ayudarte a pagar estos gastos sin ponerte en dificultades financieras. Tener un fondo designado de efectivo accesible evitará que tengas que pedir préstamos o usar tarjetas de crédito para cubrir costos repentinos.
Es importante planificar y decidir cuánto te gustaría poner en este fondo, así como determinar qué califica como un gasto de "emergencia". Con un plan establecido, será más fácil ahorrar los fondos necesarios y obtener tranquilidad en caso de que surja una emergencia financiera.
*Con información de Forbes US
