En lo que va del año, el Merval medido en dólar CCL ya sube cerca de un 25%, llegando a los 1.191 puntos durante el arranque de la semana, un nivel no visto desde junio de 2018. De esta manera, desde el mínimo de marzo de 2020, el índice accionario acumula un crecimiento del 388%.
“Para nosotros tiene sentido la suba que está teniendo el Merval. Somos constructivos desde hace mucho tiempo, venimos hablando y anticipando esta situación y hablando de un cambio de ciclo. No nos toma por sorpresa", comentaron desde Adcap Grupo Financiero.
"Las medidas del Gobierno generaron un impacto positivo y estamos empezando a ver algunos resultados. Los resultados de los bancos fueron muy buenos mientras que los de energía vienen un poco más suaves, en línea con lo esperado”, agregaron.
Por su parte, los especialistas de Portfolio Personal Inversiones indicaron que, teniendo en cuenta el nivel de riesgo país actual, que ronda los 1.300 puntos y fluctúa en base al rendimiento de los bonos soberanos, el Merval podría estar “relativamente sobrevalorado”. No obstante, aclararon que lo mismo sucedió en todo el 2023 y no hubo correcciones. De hecho, el año cerró con un aumento del índice de 64% en dólares.
“En otras palabras, considerando las condiciones actuales, no sería ilógico pensar que las acciones podrían seguir acompañando a los bonos. Es evidente que la renta variable está mirando hacia adelante, pronosticando una mejora en las condiciones, sin enfocarse en el riesgo actual”, sostuvieron.
Saliendo de las variaciones diarias y entrando en el mediano y largo plazo, el Merval parece estar navegando en un “punto intermedio”, según la analista e inversora Mariela Capezzuoli.
“Ya pasó la oportunidad de comprar en el peor momento de la crisis en 2020, pero tampoco considero que los precios actuales reflejan un mercado eufórico que nos pueda estar advirtiendo de una peligrosa cresta de un ciclo o burbuja”, relató.
De acuerdo a la experta, en estos extremos es cuando hay momentos de auge económico y una altísima sobrevaluación de activos, como lo ocurrido en 2017. Y la historia demuestra que los mercados tienden a ir en busca de los excesos, ya sea al alza o a la baja.
“Si una vez más veremos repetir la historia, entonces cabe aclarar que las acciones no se mueven en línea recta y que deberíamos estar predispuestos a ver fuertes correcciones en el camino. Algo a lo que ya deberíamos estar acostumbrados los inversores del volátil Merval”, concluyó Capezzuoli.