En Wall Street, muchos inversores y operadores observan diferentes indicadores para tratar de predecir qué podría suceder con los mercados en el futuro. Uno de los más populares es el VIX, el índice de la muerte.
Básicamente, el VIX es un índice de volatilidad que mide las expectativas del mercado sobre la volatilidad a 30 días en base a los contratos de derivados financieros sobre el S&P 500.
Cuando el VIX se encuentra en niveles altos, las acciones estadounidenses suelen estar cayendo o estar a punto de hacerlo. En cambio, cuando el VIX está bajo control, los precios están estables y usualmente al alza.
Actualmente, en el VIX se está profundizando un cruce de la muerte, patrón técnico que se da cuando su promedio móvil de 50 días (azul) se desliza por debajo del promedio móvil de 200 días (rojo).
Este movimiento podría indicar que la volatilidad está cerca de reducirse ferozmente, lo que ayudaría al S&P 500 a recuperarse y generar beneficios alcistas.
Dado que el VIX está diseñado para medir la volatilidad del mercado a corto plazo, cuanto más bajo sea, mejor será el desempeño del S&P 500, explicaron Jeffrey Hirsch y Christopher Mistal, editor y director de Stock Trader's Almanac, respectivamente.
Por lo tanto, un cruce de muerte VIX puede ser una indicación alcista, concluyeron los especialistas en una publicación para sus clientes.
De acuerdo a su análisis, desde 1990 hasta la actualidad, existieron 35 cruces de la muerte en el VIX, sin contar el actual. En estas etapas, en promedio, el S&P 500 subió entre 0,5% y 0,6% en las próximas semanas.
No obstante, Hirsch y Mistal aclararon que el cruce de la muerte podría ser una buena señal de corto plazo, no de mediano y largo plazo, ya que el escenario económico y financiero sigue siendo muy desafiante para los inversores.
Esto sugeriría que el actual cruce de la muerte del VIX probablemente sea alcista en el corto plazo, pero no es una gran indicación mucho más allá de dos semanas, sostuvieron.