El siguiente no es solamente un relato de especificaciones técnicas ni de cifras de autonomía de un automóvil. Es, en esencia, una crónica sobre la experiencia de manejo que nos transportó a un mundo que hasta hace poco parecía reservado para la ciencia ficción.
Las terminales automotrices se debaten a nivel mundial sobre la fecha exacta en que dejarán de fabricar automóviles que utilizan combustible fósil. En el mientras tanto acercan al mercado los modelos híbridos (combinación de un motor de combustión interna y uno o varios motores eléctricos) y pensando en los próximos años presentan tímidamente (al menos en la Argentina) los modelos 100% eléctricos.
Este es el caso del Mercedes Benz EQA SUV. Al abrir la puerta lo primero que se nota fue el silencio. No había rugido de motor, ni vibraciones. Solo un suave zumbido eléctrico que lo recordó a las naves espaciales de las películas. Al encenderlo, la pantalla central se iluminó con elegancia, y el tablero digital mostró la carga de la batería y la autonomía disponible. Sin duda, estaban en el futuro.
Así, el conductor se sumerge en un ambiente minimalista y elegante en el que el diseño interior, dominado por dos pantallas digitales -una de 10,25 pulgadas para el tablero de instrumentos y otra de idénticas dimensiones para la consola central- ofrece una experiencia intuitiva y fácil de usar gracias al sistema MBUX, de última generación. Este sistema brinda una gran cantidad de información y entretenimiento, permitiendo controlar diversas funciones del vehículo con solo un toque o mediante comandos de voz.
La sensación de manejo del EQA es sorprendente. Su motor eléctrico de 292 CV entrega una potencia instantánea, lo que se traduce en una aceleración impresionante, o al menos poco conocida por este humilde cronista: de 0 a 100 ks en solo 6 segundos. Al pisar el acelerador, el EQA respondió con una aceleración instantánea y sin esfuerzo. La tracción integral 4Matic distribuyó la potencia de los dos motores eléctricos de manera uniforme, permitiéndole sortear el tráfico urbano como si flotara sobre el asfalto. Las curvas se abordaron con precisión, y la ausencia de cambios de marcha lo hizo sentir como si estuviera en una dimensión paralela.
En el camino
La batería de iones de litio de 66,5 kWh brindó una autonomía de 400 kilómetros, más que suficiente para sus desplazamientos diarios. Además, cuenta con un sistema de frenado regenerativo que ayuda a recargar la batería mientras se conduce. En cuanto a la recarga, el EQA ofrece tres opciones: 1) cargador domiciliario y portátil, 2) Wallbox (incluye la compra del vehículo) y 3) cargadores rápidos de CC (en estaciones de servicio).
Se trata de un modelo que está equipado con las últimas tecnologías en seguridad, como el asistente activo de distancia Distronic, el asistente de cambio involuntario de carril y el frenado autónomo de emergencia. Además, obtuvo cinco estrellas en las pruebas de impacto del EuroNCAP, lo que lo convierte en uno de los vehículos más seguros del mercado.
Es un modelo presentado en el mercado local en el último trimestre de 2023 y a la vez es un símbolo del futuro de la movilidad. A medida que el mundo avanza hacia un futuro más sostenible, los vehículos eléctricos jugarán un papel cada vez más importante. Este modelo demuestra que los autos eléctricos no solo son viables, sino que también pueden ser deseables, ofreciendo lo mejor de ambos mundos: el rendimiento y la eficiencia de un vehículo eléctrico, junto con el lujo y la comodidad la marca.
El EQA es un modelo que recibió el premio Excelencia en Seguridad al obtener 88.70 puntos de 100 posibles y fue el de mayor índice de seguridad de todos los modelos lanzados en 2023. Sus asistencias a la conducción y la sólida estructura fueron claves en su consagración.
Según CESVI, el auto se destaca por su sistema de propulsión y por las innovaciones tecnológicas orientadas al confort y el bienestar de sus pasajeros. Las fortalezas del EQA son una estructura preparada para proteger a los ocupantes, sistemas preventivos para evitar choques y la seguridad pasiva dispuesta para minimizar las consecuencias de los impactos.
En prevención, se destaca su Alerta de Riesgo de Colisión con detección de peatones y ciclistas y Frenado Autónomo de Emergencia, e incorpora un Asistente Activo de Distancia, Alerta de Fatiga del Conductor y de Cambio Involuntario de Carril.
Las pruebas de impacto del EuroNCAP le otorgaron cinco estrellas, con 97% de protección de ocupantes adultos, 90% de protección para ocupantes infantiles y 81% para los usuarios vulnerables de la vía. Su estructura está configurada con aceros de alto límite elástico y cuenta con la presencia de aluminio en zonas de deformación y paneles de carrocería.
Para quienes buscan un vehículo que los lleve al futuro, el EQA es una opción. Su diseño futurista, su tecnología de vanguardia, su potencia y agilidad, su autonomía y recarga, y su alto nivel de seguridad lo convierten en un SUV excepcional que brinda una experiencia de manejo única.
Al final de la prueba, volvimos a la realidad. El EQA con sistema asistido, se estacionó con suavidad, y el silencio volvió a envolverlo. Nos dimos cuenta que es más que un automóvil eléctrico, es un portal hacia un mañana que ya está aquí. Y aunque no puede predecir el futuro, sabe que la electrificación de la industria automotriz es un camino sin retorno.