En este punto, incluso el fanático más entusiasta de Star Wars podría sentirse fatigado por la línea de montaje de contenido de Disney. Desde Rise of Skywalker hasta The Book of Boba Fett, solo hasta ahora la nostalgia puede llevar a la mediocridad.
Pero Andor es diferente: el programa está muy alejado del truco habitual de Disney de referencias pesadas, basura mal escrita, llena de huevos de Pascua para distraer la atención de la falta de sustancia.
Andor en realidad se siente como si tuviera lugar en otro mundo, un lugar interesante lleno de tecnología retro-futurista y rebeldes descontentos. En algunos puntos, casi se siente como Blade Runner, una mirada descarnada y fundamentada a la vida de la gente normal que vive bajo la bota del Imperio.
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El juego de Disney con Star Wars
Disney tiene una inclinación por poner precuelas dentro de precuelas, envueltas en historias de origen, una pila interminable de muñecos anidados, llenos de una historia de fondo que nunca necesitábamos saber. Pero trabajando hacia atrás, contando la historia de los rebeldes que aseguraron los planos de la Estrella de la Muerte, ahora contando la historia del origen de Cassian Andor, Disney, de alguna manera, ha creado algo que se siente fresco.
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Andor comienza con Cassian (Diego Luna) asesinando fríamente a dos de los brutales matones del Imperio. El asesinato está muy lejos de la masacre sin sentido que hemos visto tantas veces en esta franquicia, donde los Stormtroopers son aplastados como moscas (incluso por ex reclutas).
Las acciones de Cassian se enmarcan como moralmente grises y de gran importancia, lo que desencadena una represión dirigida por el joven oficial imperial, Syril (Kyle Soller), que desobedece una orden de su superior de dejarlo estar. Syril parece genuinamente molesto por los dos asesinatos, motivados por principios, en lugar de lógica, y pronto encuentra a un soldado de ideas afines, el sargento Kostek (Alex Ferns) para liderar la carga.
La relación entre los dos es fascinante, ya que Syril es muy decidido, pero inexperto, mientras que Kostek es un imbécil curtido en la batalla que desprecia a los subordinados. Los dos son como un par de tipos de seguridad del centro comercial en un pequeño viaje de poder, ejerciendo una aterradora cantidad de autoridad: ¿qué podría salir mal?.
El protagonista de Andor
Cassian mismo es un desastre agradable, muy lejos de ser un Jedi de corazón puro; es un sobreviviente rudo que intenta salir de los problemas que sigue creando.
El planeta Ferrix es sucio e industrial, el hedor de la desesperación (y los humos) en el aire, un planeta de clase trabajadora lleno de trabajadores que no tienen motivos para amar al Imperio. Es un mundo bellamente realizado, un lugar texturizado que se siente vivo y, francamente, es un alivio alejarse de las aburridas arenas de Tattoine.
El pulido de Andor contrasta marcadamente con los espectáculos de Star Wars anteriores: ¿por qué la escritura de Kenobi y Boba Fett fue tan directa y por qué el escenario CGI parecía tan poco convincente y los planetas tan sin vida?
En Andor, todas las máquinas, droides y naves se ven tan pesadas y prácticas, con la inquietante escala de Rogue One aún intacta; puedes ver los remaches oxidados que sujetan estas máquinas titánicas y tener una idea del inmenso esfuerzo detrás de su construcción.
Se siente como una extensión de ese universo cruel y peligroso que vislumbramos en A New Hope, muy alejado del lado más tonto de Star Wars, sin perder de vista la esperanza de los ojos estrellados: no hay magia Jedi en Andor, pero hay resistencia.
Al igual que los cortos animados de Star Wars, Visions y, hasta cierto punto, The Mandalorian, Andor usa Star Wars como una caja de arena, en lugar de una máquina de marketing alimentada por la nostalgia, y es aún más memorable por ello.
La comparación con otras series de Star Wars
Andor está en vivo en Disney Plus con los primeros tres episodios disponibles para ver, y esta es la cuarta serie de acción en vivo de Disney Plus a medida que más y más continúan saliendo con el tiempo.
Parecía que Andor era uno de los proyectos más inusuales planeados, eligiendo un personaje de Rogue One y dándoles su propia serie separada de aparentemente todas las demás series existentes. Pero la naturaleza sólida del "nacimiento de la rebelión" parece estar ganando. Los primeros fanáticos se cansaron de CGI masivo y enterraron huevos de Pascua y cruces.
Andor tiene buenas reseñas hasta ahora, ahora que han llegado las reseñas de los críticos. Así es como se compara con las otras series de Disney Plus que hemos visto fuera del universo de Star Wars hasta ahora:
Guerras Clon Temporada 7 – 100%
Star Wars: Visiones – 96%
The Mandalorian Temporada 1 – 93%
The Mandalorian Temporada 2 – 93%
Andor – 87%
The Bad Batch– 86%
Obi-Wan Kenobi – 82%
El libro de Boba Fett – 66%
Andor es una serie de televisión completa, no una película dividida en episodios, y se supone que el programa durará 12 episodios en la temporada 1 aquí, con miras a una segunda temporada que terminará una vez que se encuentre con los eventos de Rogue One.
Por lo tanto, es posible que el destino de Andor ya esté predeterminado, pero me pregunto qué lecciones se pueden aprender de él si su enfoque más sólido de Star Wars vale la pena, menos dependiente de CG que otros programas, un tono más oscuro, etc. etc.
Ya conocemos un montón de series que están por llegar, pero el éxito de Andor, o supongo que el teórico fracaso, podría alterar sus planes. Dado que Rogue One fue mi favorito de los nuevos éxitos de taquilla de Star Wars, ciertamente estoy ansioso por ver esto más tarde hoy.
*Nota publicada originalmente en Forbes EE.UU.
