Un pueblo en Italia relanzó recientemente su iniciativa de casas a 1 euro (1,06 dólares) como respuesta a los resultados de las elecciones en Estados Unidos. Ofreciendo una oportunidad para que los estadounidenses "agotados" escapen del drama político, el pueblo de Ollolai, en Cerdeña, puso a la venta varias propiedades abandonadas por menos del costo de un espresso.
En los últimos años, varias comunidades en Italia vendieron viviendas en ruinas por precios simbólicos con el objetivo de revitalizar sus poblaciones en declive. Estos pequeños pueblos rurales vieron cómo su cantidad de habitantes disminuyó drásticamente en las últimas décadas, mientras sus residentes buscaban mejores oportunidades económicas en las ciudades.
Localidades como Zungoli, en Campania, y Mussomeli, en Sicilia, subastaron cientos de propiedades a compradores de todo el mundo. La iniciativa también ganó popularidad entre celebridades, como Alan Carr y Amanda Holden, quienes adquirieron una casa de 1 euro en Toscana para su exitoso programa de televisión Amanda & Alan's Italian Job.
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Aunque la oferta de casas a 1 euro parece un sueño, el proceso de compra puede resultar laborioso y complicado si no se entiende cómo funciona.
"Comprar una propiedad en el extranjero como expatriado puede parecer complicado, con desafíos únicos como las barreras idiomáticas, las tasas de cambio y mayores dificultades para obtener una hipoteca. Pero es bastante sencillo si sabés lo que estás haciendo", explica William Cooper, director de marketing de los especialistas en seguros para expatriados William Russell.
"Si encontraste la casa de tus sueños en el extranjero, mis consejos son trabajar con expertos locales, monitorear las tasas de cambio y organizar los documentos financieros con anticipación para que el proceso sea lo más fluido posible", agrega.
Cooper recomienda contratar expertos locales en propiedades y leyes para sortear las barreras idiomáticas y adaptarse a las normativas locales. Si es posible, elegí agentes inmobiliarios y abogados especializados en trabajar con expatriados o buscá una comunidad de expatriados en el país al que te mudás y pedí recomendaciones.
En el caso de los expertos legales, asegurate de que estén registrados en los colegios de abogados locales. Si no hablás el idioma o no lo dominás, muchas veces estos profesionales también pueden actuar como traductores, lo que facilita todo el proceso.
También es fundamental monitorear las tasas de cambio. Transferir dinero desde tu cuenta bancaria local al vendedor en el extranjero puede generar cargos por conversión de moneda. Organizá la financiación con anticipación, ya sea a través de un banco local o una hipoteca internacional. Prestá atención a las fluctuaciones del tipo de cambio y considerá usar un especialista en divisas para ahorrar dinero.
Por último, Cooper aconseja organizar cuidadosamente los documentos financieros. Como expatriado, es posible que tengas que presentar documentación más completa a los prestamistas en el extranjero, como comprobantes de ingresos, declaraciones de impuestos e historial crediticio. Además, deberás cumplir con requisitos específicos para expatriados, como controles de lavado de dinero y verificación fiscal.
En algunos países, se exige contratar un seguro de salud privado como parte del proceso. Por eso, es buena idea gestionar estos trámites y traducir los documentos con suficiente anticipación para evitar problemas al comprar una de las casas de 1 euro en Italia.
*Con información de Forbes US.