En un momento de tu vida, podés verte atrapado en la rutina profesional. Es posible que te guste la empresa, pero empieces a sentirte aburrido o apático en tu puesto de trabajo. Incluso podés considerar buscar otro trabajo, y marcharte a un mercado laboral lleno de desafíos.
En un entorno de contratación lenta, considerar un cambio de carrera como profesional administrativo de nivel medio requiere un enfoque reflexivo y estratégico, en lugar de dejarse guiar por las emociones del momento.
Si no tenés otro empleo en perspectiva, no es recomendable que renuncies a tu trabajo. Aunque tengas pensamientos de dejarlo, tenés que pensar a largo plazo para asegurarte de conservar su sueldo fijo mientras planificás tu próximo paso profesional.
Reinventarse a uno mismo
Para salir del estancamiento, lo primero que tenés que hacer es reflexionar profundamente sobre lo que realmente te interesa y motiva, tus valores fundamentales y las cualidades transferibles que tenés.
El autoconocimiento es crucial para identificar nuevas oportunidades profesionales, ya sea dentro de la misma empresa o en una nueva, que se alineen mejor con tus pasiones, alegrías y puntos fuertes.
Una vez que identifiques y afines tus talentos, intereses y habilidades únicas, comenzá a investigar y explorar las diferentes opciones profesionales que te atraigan. Revisá las descripciones de los puestos, las cualificaciones requeridas y el potencial de crecimiento y desarrollo.
Mantené la mente abierta y sé receptivo a ideas diferentes. La clave está en encontrar algo que te saque de la rutina y te motive a saltar de la cama por la mañana para empezar el día.
Elaborá un plan de carrera que describa tus objetivos a corto y largo plazo para reinventarte. Vas a tener que enumerar los pasos necesarios para alcanzar tu objetivo. Por ejemplo, investigá la formación, las credenciales o cualquier licencia necesaria para un nuevo tipo de puesto.
Si optás por permanecer en el mismo lugar
Si querés quedarte en tu empresa, pero cambiar a otra área, empezá por hablar con tu jefe directo y con Recursos Humanos. Mantené una conversación abierta y sincera sobre tus sentimientos de desvinculación. Hablá de las posibles formas de motivar tu satisfacción laboral.
Una posibilidad es proponer el job crafting, la práctica de permanecer dentro de la organización, pero aprendiendo cosas nuevas, asumiendo tareas, proyectos e iniciativas que realmente quieras hacer y que te ayudarán a tener una perspectiva nueva y fresca en el trabajo.
Considerá un movimiento lateral dentro de la empresa. Analizá las ofertas de empleo internas buscando funciones que puedan reavivar tu pasión y utilizar tu experiencia en una nueva capacidad.
La importancia del networking
Si esto no funciona, considerá la posibilidad de buscar un nuevo empleo en otro lugar. Establecer contactos y empezar a entablar nuevas relaciones es primordial. Vas a necesitar contar con un amplio grupo de personas con ideas afines que te ayuden a construir y hacer crecer tu carrera profesional.
Asistí a eventos del sector, conectate en las redes sociales, mantené entrevistas informativas y activá tu LinkedIn y otras plataformas relacionadas con tu trabajo y carrera específicos. Actualizá tu currículum y asegurate de incluir la información importante para el nuevo puesto al que aspirás. También editá tu perfil de LinkedIn para mostrarlo sólido y exponer de forma concisa tus empleos, victorias, logros, reconocimientos y otras cosas que te ayudan a destacar como candidato.
Ponete en contacto con reclutadores especializados en tu área de especialización. El objetivo es forjar una relación para que, cuando surja una nueva oportunidad, se pongan inmediatamente en contacto con vos. También puede ser una buena opción buscar un mentor, un orientador profesional, un sponsor o coach que te ayuden a dirigir, guiar y motivar tu carrera.
Nota publicada en Forbes US.