La primera ministra de Finlandia Sanna Marin tiene mujeres de todo el mundo bailando con ella.
El trato que recibido desde que se filtraron videos suyos bailando y festejando con amigas la semana pasada tocó la fibra sensible de muchas mujeres. El hashtag #SolidaritywithSana se volvió viral en las redes sociales, donde los videos exaltan el mensaje "trabaja duro, juega duro" de Marin.
Después de que se difundieran los videos la semana pasada, algunos opositores políticos cuestionaron la competencia de Marin para ocupar el cargo y otros exigieron que se sometiera a un control antidoping. Marin accedió a hacerse el testeo de drogas (dio negativo) y dijo a los periodistas: "No tomé drogas ni consumí nada más que alcohol. Bailé, canté y festeje, cosas perfectamente legales".
Espero que en el año 2022 se acepte que hasta los tomadores de decisiones bailan, cantan y van a fiestas, dijo Marín a los periodistas. Desafortunadamente, la investigación sugiere que las mujeres que toman decisiones pueden recibir más rechazo al participar en estas actividades, incluso en los tiempos actuales.
Aunque muchos presidentes de Estados Unidos fueron abiertos sobre su consumo de alcohol, las líderes femeninas que toman habitualmente alcohol pueden enfrentarse a una doble vara. Si bien beber alcohol es algo aceptable para los hombres, las mujeres que lo hacen son percibidas como más masculinas y pueden enfrentar una reacción violenta. Un estudio encontró que incluso los hombres y mujeres que creen firmemente en la igualdad de género juzgaban más a las mujeres que bebían que a los hombres. Otro estudio reveló que las mujeres que se habían entregado al alcohol "estaban posicionadas como desviadas y que rompían los códigos tradicionales de feminidad".
El rechazo contra Marin probablemente se amplificó debido al baile que se ve en el video. Al moverse, Marin llamó más la atención sobre su cuerpo. Aunque ningún estudio investigó directamente el impacto del baile en las percepciones acerca de cuán competente puede ser para ocupar el cargo, la investigación analizó cómo una mayor conciencia del cuerpo de una mujer puede afectar lo que la gente piensa de ella.
Un relevamiento reciente utilizó la tecnología de seguimiento ocular para evaluar el impacto de ropa sensual sobre cómo la conciencia del cuerpo de una mujer afecta las percepciones de ella. Descubrieron que las mujeres que usaban ropa sensual eran percibidas como menos honestas, confiables, competentes y elegibles tanto para hombres como para mujeres.
Una candidata a la presidencia del senado estudiantil en una universidad de EE.UU. que vestía de esta forma fue percibida por 191 estudiantes universitarios como menos honesta y digna de confianza, elegible y competente que una que vestía ropa conservadora… La ropa sensual llevó a los participantes a mirar partes del cuerpo sexualizadas, que, a su vez, condujo a percibir a la candidata como menos honesta y confiable, lo que redujo las evaluaciones de su competencia y elegibilidad, escriben los autores del estudio. El video de Marin probablemente se percibió de este mismo modo.
Dado que el mundo tiene pocas mujeres líderes y jóvenes, tampoco hemos tenido mucha exposición al tiempo libre de estas. Cuando Barack Obama quería desahogarse, jugaba al básquet en la Casa Blanca. Es probable que el básquet se perciba como algo masculino, por lo que lanzar tiros al aro parecía apropiado para un líder. El canto y el baile de Marin con amigos pueden percibirse como femeninos, inusuales y fuera de lugar para una líder mundial. Mujeres de todo el mundo han estado publicando videos de ellas mismas bailando para normalizar este comportamiento y mostrar su apoyo a la primera ministra finlandesa.
Los problemas de Marin se multiplicaron cuando surgió una nueva foto de dos mujeres en la residencia oficial del primer ministro en Helsinki. La pareja estaba en topless, cubriendo sus senos desnudos con un cartel de "Finlandia". Marin emitió una disculpa, afirmando: En mi opinión, la imagen no es apropiada. Me disculpo por eso. Ese tipo de foto no debería haberse tomado, pero por lo demás, no sucedió nada extraordinario en la reunión. Para ser claros, Marin no estaba en la foto; simplemente fue tomada en una fiesta en su residencia. Aunque no es sorprendente que la fotografía sea controvertida, es interesante notar otra doble vara: los líderes mundiales masculinos son fotografiados regularmente sin la parte de arriba.
Muchas mujeres que trabajan enfrentan a diario la doble vara, como Marin. Cuando estas mujeres se promocionan a sí mismas, hablan de manera directa o dominante o, como en el caso de Marin, beben alcohol, pueden ser percibidas como demasiado masculinas y pueden enfrentar una reacción violenta. Si revelan su lado femenino bailando con amigos o mostrando sus cuerpos, se las percibe como menos competentes. En otras palabras, no pueden ganar.