Con más de tres décadas en el rubro y tras permanecer dos períodos como vicepresidente, Alejandro Ruibal pasa a ser el líder de la Cámara de la Construcción del Uruguay (CCU), una gremial que ya integra desde hace muchos años. “Para mí en parte es continuidad, pero también es la posibilidad de impulsar algunos temas que considero importantes”, contó a Forbes Uruguay quien estará en el cargo hasta 2025.
El nuevo presidente se sumará a la directiva que actualmente integran el ingeniero agrónomo Marcos Taranto; los ingenieros Gustavo Errecart, Gabriel Viñales, Daniel Vázquez, Leonardo Macció y Luis Gallo; y los empresarios Alfonso Carrau y Damián Boix. Hasta el momento y desde 2018 el cargo era ocupado por el ingeniero Diego O'Neill.
Para desempeñar su nuevo rol, explicó, se basará en tres ejes: inversión en infraestructura pública o privada, derechos de las empresas socias y buenas prácticas. El objetivo será mantener con fuerza un sector calificado por la ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, como un “motor” para el desarrollo.
Con respecto al primer eje, Ruibal expresó que refiere a la importancia de que se invierta en infraestructura. “Pero no en cualquier proyecto, sino en aquellos en los que valga la pena”, como es el caso de la infraestructura vial, portuaria, energética, telecomunicaciones, vivienda, saneamiento y ferroviaria, entre otros. “Todo ese tipo de inversiones las quiero seguir impulsando, que la cámara ayude a través del Centro de Estudios de la Industria de la Construcción (CEEIC) y también empujando soluciones creativas para poder financiar proyectos”, indicó.
El segundo eje se relaciona directamente con la competencia. “Queremos tener igualdad de condiciones con empresas extranjeras cuando nos toque competir, entendiendo que las empresas locales tenemos arraigo, invertimos acá y tenemos nuestras inversiones en activos fijos”, detalló Ruibal.
En ese sentido, el flamante presidente de la cámara aseguró que actualmente hay “algunos temas a ajustar” para lograr una competencia justa. Por ejemplo, la importación de equipamiento de admisión temporaria. Mientras que las empresas locales compran maquinaria propia, las compañías extranjeras pueden traerlas de afuera sin tener que pagar tasas, lo que implica “una desventaja”.
En la misma línea, consideró que sería necesario ser “más estrictos” a la hora de controlar los antecedentes de las empresas que no están acá. “Cuando digo 'extranjeras' hay algunas que son socias de la cámara, están instaladas y esas son bienvenidas. A las que me refiero son a esas que a veces aparecen y desaparecen, que son temporales y que llevan a una competencia desigual”, aclaró.
Finalmente, el tercer eje refiere al fomento del formalismo, el cuidado, la seguridad y la higiene de los trabajadores, a la prevención de accidentes y a la sustentabilidad, punto referido al cuidado del medioambiente, los residuos de las obras y el reciclaje. “Es algo en lo que hay que hacer mucho foco, hay mucho para hacer”, dijo.
Agencia de infraestructura
Los planes de Ruibal para el futuro cercano son reunirse con autoridades de diferentes áreas para presentarles su mapa de acción, entre ellas con la ministra Arbeleche, con quien se buscará impulsar una agencia de infraestructura con foco en inversiones a largo plazo.
“Es un plan que ya lanzamos hace algún tiempo, La idea es que se acelere en el Estado un organismo que mire los proyectos a largo plazo. Entendemos que es algo que debería crearse para que cuando cambien los gobiernos no se tenga que plantear todo el proyecto de nuevo”, indicó.
El objetivo entonces sería crear un banco con los proyectos más relevantes y que luego se puedan mantener en el tiempo. “Después, cada gobierno le dará la impronta o el énfasis al sector que entienda mejor”, agregó.
En la misma línea, el actual director de Saceem aseguró que para mantener el rubro en actividad más allá de los grandes proyectos que generan nuevos puestos de trabajo como es el caso de la segunda planta de UPM, se debe contar con inversión por parte del Estado.
“El sector de la vivienda privada está con un muy buen nivel de actividad, es un rubro en el que se está trabajando mucho de la mano de las exoneraciones y los decretos que han permitido mejorar mucho el régimen impositivo. Pero cuando uno construye vivienda también hay que construir infraestructura: ruta, saneamiento, agua, y ahí es donde el Estado tiene que estar presente”, consideró. “Eso debería poder ayudar un poco a la caída de la actividad p
rivada que no es vivienda, como los proyectos como UPM o el ferrocarril”, aseveró.
Pasión y organización
Ruibal es egresado de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de la República. Desde ese momento y durante toda su carrera, lideró importantes obras como la realizada en la primera Central de Ciclo Combinado de UTE, el Estadio Campeón del Siglo de Peñarol, Montes del Plata y el complejo World Trade Center, entre otros.
¿Cómo lo logró? El director de Saceem asegura que fue necesario tener determinación, mucho esfuerzo y especialmente una buena coordinación. “Hay que saber acomodar las prioridades: darle tiempo a la familia, en mi caso también al deporte, al trabajo y a todas estas otras actividades”, expresó.
“Hay que organizarse para multiplicarse, no hay otra forma”, indicó Ruibal. A esto se suma un ingrediente clave: la pasión. “Hay que hacer cosas que te despierten pasión, porque si no entonces no te rinde el tiempo y te parece interminable. Es importante buscar cosas que te muevan”, aconsejó. Sobre ese tema expuso también en Forbes CEO Summit en noviembre pasado.
La receta se completa con la habilidad de saber delegar. De esta manera, Ruibal asegura que se logra conformar un equipo ganador para llegar muy lejos.