Dio sus primeros pasos laborales como peón de depósito en Chiclet s Adams, cuando tenía 17 años. Lo recuerdo con un poco de vergüenza, porque tenía que ir mi madre a firmar una autorización especial. Arranqué motivado por la necesidad de generar un ingreso. Vengo de una familia bastante humilde, dice Hugo Benedetti.
Cincuenta años después, el socio y director de IBF Negocios recuerda ese primer empleo como parte fundamental de su historia. Mi trabajo allí fue tremendamente inspirador. Tuve la oportunidad de hacer una carrera muy buena. Mis jefes me alentaban a seguir formándome.
Mi introducción al mundo empresarial y a concebir la carrera como una progresión lineal fue ahí, sostiene.
Llegó a ser Jefe de Compras y Comercio Exterior y dejó Chiclets Adams con 27 años. Continuó su carrera en una empresa del grupo Coca-Cola y luego en Nuvó Cosméticos, donde tuvo su primera experiencia gerencial con 31 años, que le dio herramientas para cofundar IBF Negocios más adelante (2011).
Años después, Sara Lee Corporation compró Nuvó Cosméticos y así surgió la oportunidad de ir a trabajar a Argentina por dos años (terminaron siendo varios más).
Ayudé a expandir las operaciones en la región a través de la adquisición de empresas. Gracias a Sara Lee aprendí este métier y pensé que el día que saliera de la corporación podría tener una compañía de inversiones, recuerda.
Así fue. Benedetti comparte cinco grandes aprendizajes a quienes empiezan su carrera hoy.
Uno: Buscar modelos de liderazgo positivos a quienes seguir.
Dos: Tener en cuenta el entorno. Vas a tender a parecerte al entorno. Es importante rodearse de buenos compañeros, gente que empuje y acepte desafíos.
Tres: Confiar en uno mismo.
Si tenés el propósito y el plan, enfocate en la ejecución. Tu futuro depende de vos, no del presidente de la República ni del jefe.
Cuatro: Ser un eterno aprendiz. Mientras estés interesado en cargar más cosas en tu mochila, estás en el camino correcto.
Cinco: Tener buenas escuelas, trabajar en empresas estructuradas con modelos de negocio que funcionen. Es un paso que no hay que saltarse.
De yapa, el empresario alienta a quienes tienen carrera corporativa e interés por lanzarse a la vida independiente, a hacerlo. Tengan fe en que pueden soltarse del pasamanos".