El 36% de los directivos reportan niveles alarmantes de estrés y agotamiento en 2024
Mejorar el bienestar de los líderes debe ser una prioridad para las empresas, ya que son quienes crean entornos psicológicamente seguros para el desarrollo de talento y el crecimiento del negocio.

En muchos lugares se está agravando la división y la desconfianza entre directivos y empleados. Una encuesta reciente sobre comunicación y bienestar laboral de Firstup reveló que el estrés en el lugar de trabajo es omnipresente. 

El 60% de los encuestados  afirma que su trabajo es la principal fuente de estrés.

Un nuevo estudio publicado hoy muestra niveles alarmantes de estrés y agotamiento entre los directivos, y muchos de ellos se plantean dejar su trabajo. Los líderes en crecimiento no demuestran las habilidades adecuadas para la gestión de conflictos, mientras crece la tendencia "The Great Unbossing", la moda de recortar los puestos directivos. Amazon despidió esta semana a más de 100 responsables de atención al cliente.

 


Seguridad psicológica y descortesía en el lugar de trabajo


Según The Workforce Institute, los directivos tienen un mayor impacto en la salud mental de una persona que un médico o un terapeuta. No es de extrañar que un informe de Gallup descubra que los directivos tienen más probabilidades de estar estresados, enfadados, tristes y solos que los no directivos, dadas las enormes responsabilidades que recaen sobre sus hombros, unidas al desafiante clima económico, político y social.

Asimismo, meQuilibrium reveló que el 36% de los directivos son más propensos a declarar sentirse agobiados y el 24% más propensos a considerar la posibilidad de dejar su trabajo en los próximos seis meses, en comparación con los no directivos. 

Los alarmantes niveles de estrés y agotamiento de los directivos pueden repercutir negativamente en el compromiso, la motivación, la productividad y las tasas de rotación de los empleados.

 

A pesar del estrés al que están sometidos, los directivos aportan beneficios a la salud mental de los empleados, según el informe de meQuilibrium. Los trabajadores que cuentan con el apoyo de los directivos tienen un 25% menos de probabilidades de padecer síntomas somáticos de estrés, un 33% menos de tener dificultades para motivarse por las mañanas y un 56% menos de sufrir un elevado estrés laboral. El agotamiento es un 58% menor entre los empleados que experimentan un fuerte apoyo de los directivos para su bienestar mental. Quienes se sienten apoyados por su jefe tienen 4,5 veces más posibilidades de permanecer en la empresa.

El informe subraya que los directivos fuertes aumentan la seguridad psicológica hasta en un 42%. Por eso, mejorar el bienestar entre los directivos debe ser una prioridad organizativa, ya que son quienes crean entornos psicológicamente seguros, en los que los empleados se sienten cómodos asumiendo riesgos y compartiendo ideas.

Contar con directivos eficaces es la primera línea de defensa contra el aumento de la descortesía en el lugar de trabajo. Dada la creciente polarización en cuestiones políticas y sociales, unida a las presiones económicas generalizadas, los empleados que cuentan con un fuerte apoyo de sus directivos afirman tener un 66% menos de probabilidades de experimentar situaciones descorteses en el trabajo. Para apoyar eficazmente a sus equipos, los directivos deben gestionar activamente su salud mental, lo que no sólo mejorará su capacidad para dirigir con eficacia, sino que también servirá de modelo de comportamientos saludables para sus empleados.

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Dificultad para gestionar los conflictos


DDI publicó nuevos datos sobre el aumento de la competencia de los directivos con la gestión de conflictos en el lugar de trabajo. Las evaluaciones realizadas a más de 70.000 candidatos a directivos en todo el mundo revelaron que casi la mitad (49%) no logra demostrar habilidades efectivas para la gestión de conflictos y sólo el 12% muestra un alto nivel de competencia en esta área. Según el informe, la incapacidad de los candidatos a directivos para aclarar problemas, ofrecer apoyo y empoderar a los miembros de su equipo obstaculiza la productividad y la moral.

Según Stephanie Neal, directora del Centro de Análisis e Investigación del Comportamiento de DDI: "Con el aumento de las tensiones políticas y la creciente desconfianza de los empleados hacia los líderes, los lugares de trabajo se están convirtiendo en lugares más polarizados. Los conflictos pueden tener un efecto dominó en todas las organizaciones, ahogando la productividad, la creatividad y la moral, y, en última instancia, impulsando una mayor rotación". La especialista insiste en que ahora es el momento de que los líderes aborden el punto ciego de la gestión de conflictos.

Los líderes reconocen la gestión de conflictos como un punto débil, y sólo el 30% expresa confianza en su capacidad para gestionar conflictos. La evaluación del liderazgo realizada por DDI reveló las lagunas específicas en las habilidades que contribuyen a los errores en la gestión de conflictos entre los líderes de primera línea, entre ellas:

 

- El 61% de los candidatos a directivos tienen dificultades para aclarar las cuestiones fundamentales. Algunos errores comunes incluyen que los líderes asuman que tienen toda la verdad o adivinen los motivos de los empleados. También revelan que los conflictos a menudo se derivan de una falta de comprensión, por lo que es fundamental que los líderes busquen proactivamente aclaraciones antes de que las diferencias se conviertan en una disputa.

- El 65% de los candidatos a directivos demuestra dificultades para ofrecer apoyo y recursos a su equipo. Muchos no se preparan para las discusiones conflictivas, lo que provoca malentendidos y un apoyo inadecuado. Las organizaciones deberían dar prioridad al desarrollo de la inteligencia emocional y las habilidades de empatía de los líderes, para que estén preparados cuando surja una conversación difícil.

- El 60% de los candidatos a directivos tienen problemas para dar poder a los demás. Animar a los empleados a apropiarse de un conflicto es crucial para resolver el problema y reforzar la dinámica del equipo. El informe recomienda que los líderes mejoren su capacidad para formular preguntas abiertas e implicar a los miembros del equipo en el desarrollo de una solución.

 


¿Deshacerse de los directivos o invertir en ellos?


Tacy M. Byham, CEO de DDI, reconoce el valor de apoyar a la nueva generación de directivos. "Aunque un conflicto mal gestionado es un riesgo empresarial importante, el conflicto también presenta una oportunidad para un debate saludable, que en última instancia resulta en un cambio positivo que es mejor porque se aclararon las cuestiones difíciles y todas las partes estaban dispuestas a desafiar su forma de pensar", afirmó.

"Al ayudar a la próxima generación de líderes a cultivar las habilidades para manejar los conflictos con eficacia, las organizaciones pueden fomentar la innovación y el crecimiento con equipos más centrados y alineados", añadió el CEO.

Sin embargo, otra tendencia que está cobrando impulso es el abandono de los puestos de mando intermedio, un movimiento con importantes repercusiones para el personal. Muchos líderes empresariales sostienen que los mandos intermedios son un conducto necesario entre los empleados y los altos dirigentes, y que necesitan más apoyo debido a las presiones a las que están sometidos.

 

Según Jamie Aitken, vicepresidenta de transformación de RRHH de Betterworks, la eliminación de directivos tiene varios inconvenientes. "Esta medida puede parecer atractiva para aumentar la agilidad y reducir la burocracia, pero los inconvenientes pueden ser perjudiciales para la moral y el engagement de los empleados. Sin el apoyo y la dirección de gestores experimentados, los empleados pueden tener problemas de claridad, dirección y crecimiento profesional, lo que en última instancia puede repercutir en el éxito de la organización y en los resultados empresariales", reflexionó.

Según los datos, es indiscutible que los directivos son determinantes para el bienestar y el rendimiento personal. Existen diversas acciones que las organizaciones pueden hacer para fomentar el bienestar de los directivos:

- Desplegar técnicas basadas en pruebas para fomentar la resiliencia, de modo que los directivos puedan reconocer y sustituir los patrones de pensamiento improductivos por alternativas más eficaces.

 

- Dar prioridad al autocuidado y dirigir a los directivos con dificultades para que accedan a los recursos que ya existen en el ecosistema de beneficios.

- Fomentar una cultura de apoyo en la que hablar de salud mental esté desestigmatizado.

Aitken sostiene que los mandos intermedios proporcionan un apoyo, una orientación y una motivación esenciales que son fundamentales para mantener un personal productivo. "Los beneficios de invertir en el desarrollo de los directivos (proporcionándoles las herramientas y la tecnología adecuadas) son mucho mayores que simplemente eliminarlos", concluyó.

Nota publicada en Forbes US.