El MBA de MIT Sloan (Instituto Tecnológico de Massachusetts) es el cuarto mejor rankeado a nivel mundial, y una de sus materias -Product Management Lab- ofrece a sus alumnos la posibilidad de realizar prácticas en empresas de tecnología. Entre las cerca de 40 firmas seleccionadas este año por el MIT para recibir a sus estudiantes se encuentra OrderEat, la plataforma creada en 2019 por tres uruguayos de 17 años que veían la necesidad de agilizar el servicio de la cantina del comedor de su colegio.
La plataforma de OrderEat permite a alumnos y padres hacer pedidos, pagar y gestionar el dinero, marcar restricciones alimentarias y monitorear los consumos. Las cantinas eliminan las filas, gestionan de forma más eficiente los productos y pedidos, automatizan los procesos y unifican los cobros.
Recientemente el CEO de la empresa, Matías Craviotto, participó en el evento de presentación de las propuestas a los alumnos. Planteó un proyecto orientado al benchmarking para el mercado de Estados Unidos e hizo networking con docentes y estudiantes. En estos meses unos y otros se elegirán mutuamente y en enero y febrero trabajarán juntos durante algunas semanas en un proyecto con objetivos y entregables muy definidos.
"Va a ser buenísimo, porque tendremos a tres o cuatro personas fuera de serie -porque estudian en el MIT- trabajando para nosotros y validando lo que necesitemos", valoró Craviotto, que es confundador de la empresa junto con Luis Pedro Carrero y Juan Manuel Rodríguez. El camino de OrderEat hacia el MIT había comenzado el año pasado, a raíz de la participación de otra uruguaya, Strike, en ese mismo programa. Los compatriotas los recomendaron y pasaron con éxito el proceso de selección.
La experiencia de OrderEat revela que las dinámicas del mercado educativo son muy similares en América Latina, pero no ocurre lo mismo en Estados Unidos. Por eso este trabajo con el MIT los ayudará a dar pasos firmes y seguros hacia el norte del continente, mientras no pierden el foco en el sur. Así lo explicó el CEO a Forbes Uruguay: "Todo lo que nosotros hemos armado para Uruguay, Argentina y México -los países donde tenemos más presencia- se puede replicar fácilmente en Colombia, en Brasil, y en general en toda América Latina. Pero para EEUU tendríamos que aprender todo de cero. Estamos haciéndolo, pero no nos apura ir ya a ese país porque todavía no hay competidores claros en Latinoamérica, tenemos muchísimo para crecer y podemos replicar todos los aprendizajes que ya tenemos".
Chile, Colombia y desembarco en Brasil
El ritmo de crecimiento habla del potencial de la empresa. "Cuando nos entrevistaron para Forbes en febrero de 2023, la noticia era que habíamos procesado hasta 2022 más de US$ 2 millones. Ahora procesamos esa misma cifra de US$ 2 millones solo el mes pasado. OrderEat creció muchísimo: hoy tenemos unos 250 colegios trabajando con nosotros, más de 160 en México, que es el mercado más importante", ejemplificó Craviotto. También tienen 45 instituciones en Uruguay, 35 en Argentina y algunas más en Paraguay, Venezuela, República Dominicana y Guatemala. "Ahora estamos abriendo en Chile, luego iremos a Colombia y queremos llegar a los 1.000 colegios para fines de 2025", agregó.
En el sector hay poca competencia, pero ciertamente ninguna de las otras plataformas tiene el crecimiento que sostuvo OrderEat. Su CEO se lo atribuye al aprendizaje de hacer un producto "fácilmente repetible y escalable", y por eso ven que todavía tienen un gran mercado por delante.
A corto plazo, los fundadores esperan tener, en abril, una nueva ronda para levantar capital. "Si todo sale bien, la idea es que en setiembre 2025 yo me vaya a vivir a Brasil para abrir ahí y apuntar al comienzo de clases en 2026 en Brasil", adelantó Craviotto.
Hasta ahora la startup ha participado en dos rondas de financiación. La primera fue en enero de 2023 y les resultó en US$ 300.000, lo que los impulsó a tomar la decisión de que dos fundadores se mudaran a México para apostar por ese país. En pocos meses pasaron de ser 4 a 15 personas y sumaron colegios en varias ciudades. En marzo de este año cerraron una segunda ronda con US$ 500.000 y a los anteriores inversores -entre los que se encuentra por ejemplo el fondo MrPink- se sumaron otros con valor estratégico como el director de Finanzas de Rappicard México Hiram Valdez, o el CEO de Tryolabs, Alan Descoins.
Foco en los colegios
"Si hago una definición rápida, puedo decir que ofrecemos una solución para cafeterías de clientela recurrente. La dinámica de un colegio es la misma que la de una empresa, una universidad, un club deportivo, un hospital: hay necesidades y soluciones similares", reconoció Craviotto, que tiene entre sus clientes a algunas de estas instituciones. Y agregó: "Pero nuestro foco está en los colegios porque aquí encontramos una oportunidad muy grande y nos hemos ido especializando. Ahora que tenemos más de 250, muchos de los cuales son los mejores en sus países, es más fácil que otros confíen en nosotros (...). Estamos haciendo algunas cositas para ir validando nuevos revenue streams, pero con el 10 o 15% de nuestro tiempo".
En esta misma línea, los fundadores se visualizan durante más tiempo al frente de la empresa, pese a que han recibido algunas ofertas de compra. "A la hora de tomar esa decisión, la cuestión pasa por ver si sos la persona indicada para liderar el crecimiento. Creemos que todavía hay una oportunidad muy grande y, con los ratios que tenemos, recién estamos empezando a ser lo que podríamos llegar a ser", sostuvo Craviotto.
Al día de hoy hay 21 personas en el equipo y los socios enfrentan nuevos desafíos, como el de dirigir personas más grandes o la tentación de dar pasos apresurados. "Estamos entrando en la etapa más linda. Ya pasamos la de supervivencia pura y validación. Tenemos algo que sabemos que funciona, hay que escalarlo de la manera correcta para poder 'sacarla del estadio'. Van a ser las etapas más desafiantes, pero las que más me entusiasman", concluyó Craviotto.