Las vacunas contra el cáncer de ARNm personalizadas arrojaron resultados prometedores: lo que tenés que saber
Un ensayo de Merck y Moderna mostró avances impresionantes, desarrollando vacunas para cada paciente mediante secuenciación genética e inteligencia artificial.

Las vacunas contra el cáncer empiezan a mostrar resultados: Moderna y Merck dieron a conocer datos prometedores sobre una vacuna experimental contra el cáncer de piel y el Reino Unido anunció esta semana planes históricos para probar la tecnología en todo el país, tras décadas de investigación que podrían traer una nueva era de medicina personalizada.

Merck y Moderna publicaron datos positivos y “extremadamente impresionantes” de un ensayo en fase intermedia de la primera vacuna personalizada del mundo con ARNm contra el melanoma, la forma más letal de cáncer de piel. Al utilizarse junto con Keytruda, la inmunoterapia superventas de Merck, redujo a la mitad el riesgo de muerte o reaparición en los pacientes.

El ensayo es el estudio más largo sobre la nueva tecnología realizado hasta la fecha. Forma parte de un número creciente de colaboraciones que prueban cómo las vacunas de ARNm (la tecnología en la que se basaron las inyecciones para el Covid-19 de Pfizer, BioNTech y Moderna) pueden utilizarse contra distintos tipos de cáncer.

 

Datos claves

El ARNm, abreviatura de ácido ribonucleico mensajero, es un tipo de molécula informativa que transporta instrucciones para las células sobre cómo hacer proteínas, incluidos los antígenos que pueden estimular el sistema inmunitario.

Mientras que las vacunas de ARNm para virus como el COVID-19 están diseñadas para prevenir la enfermedad dando instrucciones a las células para que produzcan una proteína vírica inofensiva que entrene al sistema inmunitario para reconocer y defenderse del virus en el futuro, las vacunas de ARNm contra el cáncer son terapéuticas y están destinadas a personas que ya padecen cáncer.

Cada vacuna se desarrolla utilizando muestras de su cáncer y se personaliza para cada paciente mediante secuenciación genética e inteligencia artificial, lo que prepara al sistema inmunitario para reconocer mutaciones o características únicas de las células cancerosas y atacarlas si queda alguna o resurge tras tratamientos como la cirugía, aumentando las posibilidades de recuperación y de permanecer libre de cáncer en el futuro.

 

Además del melanoma, ya están previstos o en marcha ensayos de las vacunas personalizadas para una amplia gama de cánceres, incluidos otros cánceres de piel, cuello y cabeza, pulmón, páncreas, vejiga y riñón. Los expertos dicen que podrían significar un rotundo cambio, ya que ofrecen una esperanza real de curar el cáncer.


Un cambio incipiente

Aunque las vacunas contra el cáncer con ARNm empiezan a ser prometedoras y los expertos insinúan que se avecina un cambio de paradigma en el tratamiento del cáncer, aún es pronto para esta terapia. Los tratamientos tienen un largo camino por recorrer hasta entrar en la práctica clínica general. 

Hasta su aprobación, los tratamientos con vacunas se consideran experimentales y estarán disponibles principalmente como parte de ensayos clínicos, para los que ya se están reclutando pacientes en todo el mundo. 

 

A finales de mayo, Inglaterra anunció un plan pionero destinado a agilizar el proceso de reclutamiento de voluntarios, con frecuencia difícil, para los ensayos. 

El Servicio Nacional de Salud de ese país actuará como intermediario poniendo en contacto a miles de pacientes con diferentes ensayos clínicos para vacunas específicas contra el cáncer como parte del plan, llamado Plataforma de lanzamiento de la vacuna contra el cáncer

Victoria Kunene, médicá que dirige el ensayo en el Hospital Queen Elizabeth de Birmingham, declaró a la BBC que cree que las vacunas marcan una “nueva era” y añadió que espera que algún día se conviertan en “el estándar de atención médica”.

 

Hacia el futuro

Merck y Moderna afirmaron que comenzaron ensayos clínicos de fase tardía para su vacuna contra el melanoma y una vacuna contra el cáncer de pulmón, y que ambas están “inscribiendo activamente” a participantes. 

Las empresas también iniciaron ensayos de fase media o tardía del carcinoma de células escamosas, otro tipo de cáncer de piel, así como de un tipo de cáncer de riñón y del carcinoma urotelial, que representa la mayoría de los cánceres de vejiga.

A finales del año pasado, el CEO de Moderna, Stéphane Bancel, habló sobre la vacuna contra el melanoma: “Creemos que en algunos países el producto podría lanzarse bajo aprobación acelerada para 2025”, dijo a AFP, describiendo las vacunas como “Inmunoterapia 2.0”.

 

Antecedentes

Los primeros éxitos de la vacuna contra el cáncer de Moderna ayudaron a subir la confianza en la empresa y en su futuro. Aunque la empresa prosperó durante la pandemia, sus vacunas contra el coronavirus siguen siendo su único producto en el mercado. Esto cambiará pronto tras la reciente aprobación de su vacuna contra el VRS, la segunda de su historia. 

Moderna lucha por mantener su perfil en medio de la afluencia de competidores de ARNm y la menguante demanda ante la disminución del Covid-19. 

Aunque mantiene una sólida cartera de vacunas tradicionales en desarrollo que utilizan su tecnología de ARNm -como para la enfermedad de Lyme, la gripe y el norovirus-, la empresa apostó fuerte por sus tratamientos personalizados contra el cáncer y tiene claro que planea estar a la vanguardia de esta nueva frontera de la medicina.

Nota publicada en Forbes US.