Esta semana, en el estadio Emirates del Arsenal, el organismo rector del fútbol europeo, la UEFA, presentó su calculadora de la huella de carbono. En esencia, la calculadora es una herramienta que simplifica la clasificación de las categorías del protocolo de gases de efecto invernadero y se ajusta específicamente a las operaciones futbolísticas.
La calculadora va acompañada de una guía del usuario, videos tutoriales y una metodología completa. Es la primera vez que un organismo rector del deporte pone en marcha una herramienta de este tipo a esta escala "para ayudar a cualquiera que participe en el fútbol a calcular, comprender y, por tanto, actuar sobre sus emisiones relacionadas con el juego".
La Liga Nacional de Hockey y SAP lanzaron NHL Venue Metrics en 2022 para medir y analizar la huella de carbono generada por sus 32 clubes. La Federación Internacional de Orientación tiene una calculadora de carbono para las emisiones de CO2 de su viaje en auto y la FIA lanzó una herramienta de cálculo de carbono online para su propia federación, así como para sus partes interesadas en 2021.
Dos desafíos comunes citados por las organizaciones futbolísticas y deportivas a la hora de avanzar en sus esfuerzos en materia de sostenibilidad medioambiental son no saber por dónde empezar y carecer de los recursos internos o la experiencia necesarios para llevar a cabo esta labor.
La frase "no se puede gestionar lo que no se mide" se cita con frecuencia, y The Economist informó que en 2015 había 300.000 clubes de fútbol en todo el mundo. Esta calculadora no les proporcionará los recursos necesarios para recopilar e introducir los datos en la herramienta, ni creará una estrategia de reducción para ellos. Sin embargo, va a ayudar a aquellos que estén preparados para calcular su huella de carbono de referencia a hacerlo de una manera más estandarizada. Debería animar a más clubes a iniciar este trabajo.
Así lo resaltó Thomas Seillé, responsable de proyectos y RSC de la Federación Francesa de Fútbol, en su intervención en la presentación de esta semana. Comentó durante una mesa redonda que la herramienta "permite a las organizaciones ahorrar tiempo y concentrarse en la recopilación de datos y, lo más importante, elaborar una estrategia de reducción de emisiones. Esto es sólo el principio del viaje".
Se pidió a los ponentes que compartieran sus puntos de vista sobre el panorama general de la información climática y las actividades centradas en el medio ambiente en el fútbol y el deporte.
Lindita Xhaferi-Salihu, responsable de Deportes para la Acción Climática de ONU Cambio Climático, señaló que "el fútbol puede dar un paso adelante y hacer mucho más" y que la calculadora es una "señal alentadora".
Ariela Caglio, profesora asociada de contabilidad de gestión en la Universidad Bocconi y asesora principal de la UEFA, habló de la nueva Directiva sobre Informes de Sostenibilidad Corporativa en Europa, y de cómo afectará no sólo a los clubes de fútbol que estarán sujetos a divulgación, sino a muchos más debido a las obligaciones de sus patrocinadores en virtud de la Directiva. Resaltó que la calculadora de carbono se anticipa a lo que los clubes y organizaciones tendrán que proporcionar en los próximos años en relación con las emisiones de gases de efecto invernadero.
Michael Lloyd, responsable de sostenibilidad medioambiental del Arsenal Football Club, fue preguntado durante el acto por la colaboración en iniciativas medioambientales entre los clubes de la Premier League, y respondió: “Todos queremos ser los mejores sobre el terreno de juego, pero fuera de él colaboramos estrechamente. Estamos subiendo el ritmo”.
Matouš Michnevič, vicepresidente y responsable de ESG para Europa de Mastercard, afirmó que "los clubes deportivos tienen que ponerse al nivel de las empresas" y resaltó el papel de los incentivos para los aficionados: "Si no llevan una vida económicamente sana, no se preocuparán por la sostenibilidad".
Thom Rawson, de Sustainable Football, señala en su resumen de la presentación de la calculadora que no hay atajos para generar datos de buena calidad, detallados y completos que introducir en la herramienta. La herramienta puede evolucionar en el futuro, pero esta presentación es un claro indicador de que el fútbol y, por extensión, el deporte, están avanzando hacia un enfoque más estandarizado y orientado a la acción para abordar el impacto medioambiental.
*Con información de Forbes US