Muchas personas pasan por esta vida sin hallar una pasión. No es el caso de Juan Laborda, el DJ argentino que combina dos de sus grandes motores en la vida: la música y la publicidad. Su relación con el mundo artístico comenzó desde que era muy chico y producto de la necesidad. Sólo tenía catorce años cuando decidió acompañar a su hermano, quien pasaba música en fiestas de colegios y kermeses para juntar dinero para sus proyectos personales.
Se dio cuenta que su futuro estaba ahí. Gracias a la música, no solo pudo juntar plata y colaborar con su familia, sino también escapar de un difícil presente en aquel entonces. Y, a los quince años, creó Comunidad Babasónica, una red social que hacía de punto de encuentro digital entre fans de la banda, con miles de suscriptores de todo el mundo. Aquel emprendimiento le valió una nominación a un premio MTV Latinoamérica a mejor web de música.
Al terminar la secundaria estudió publicidad. Trabajó en importantes agencias, creando y participando en reconocidas campañas de marcas líderes de cerveza, bebidas y telefonía celular. “En mis doce años como creativo publicitario, hice trabajos para Coca-Cola, Pepsi, Quilmes, Schneider, Netflix, Spotify, Movistar, Visa, Alto Palermo, Puma, Corona, Imperial, 7up, Jeep, Fiat, Finca Las Moras y muchas más”, precisa. En paralelo, comenzó a dar sus propios shows con su nombre como bandera, “Juani Laborda".
La combinación de sus dos pasiones
“Sumé la publicidad como una posibilidad para aprender y navegar por mundos que siempre quise conocer”, cuenta el DJ. “Sabía que, como creativo, me iba a involucrar con fotógrafos, directores de cine, animadores gráficos, guionistas, headers de marketing, de negocios, músicos y más; mucha gente de la que aprender y aportar”, agrega.
Pero convivir con los dos mundos a la vez, la música y la publicidad, no fue fácil. “He salido de la agencia después de hora e irme directo a Aeroparque para viajar a un show en el interior, darlo y a las horas volver a la agencia en Buenos Aires para luego presentar con el equipo una campaña a un cliente en Europa por videollamada. Siempre di todo, y nunca abandoné el trabajo en equipo”, revela sobre el detrás de escena.
Al final de cuentas, cree que siempre se generó una sinergia entre ambas pasiones. “La creatividad publicitaria me daba herramientas de exploración, nuevas maneras de pensar o mirar las cosas. La música me daba la posibilidad de llevarlas a cabo. ¿Por qué? En la publicidad tenés muchos puntos hasta hacer realidad una idea; en la música simplemente tenés que tener el coraje de hacerlas”, enfatiza.
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Su sello como músico
Juani Laborda realiza lo que técnicamente se denomina Open Format, que consiste en mezclar todo tipo de géneros musicales. Puede mezclar temas antiguos con contemporáneos, rock con pop, reggaetón con hip hop o cumbia con electrónica.
Su carisma y energía lo hicieron destacar, ganando cada vez más preponderancia en la noche porteña, a la que pronto se sumaron giras nacionales e internacionales. Desde el 2017, es el host de la noche más selecta de Punta del Este, Sensation, la bienvenida a un nuevo año entre personalidades y celebridades, donde uno de los sellos es el clima que genera el DJ argentino.
En su show, al igual que con los géneros musicales, se reversiona constantemente, sorprendiendo minuto a minuto al público. Allí despliega su arte sobre el escenario, y con invitados, efectos especiales y visuales se convierte en un verdadero maestro de orquesta.
Decidido a darlo todo por la música, en el 2020 renunció a la publicidad, pero la pandemia lo hizo cambiar de planes. Rápidamente logró reinventarse y combinar sus dos pasiones, fundando FEAT, la productora musical que compone jingles con una fresca nueva mirada, no solo de composición, sino también de trabajo, dándole lugar sus a colegas y compañeros del ámbito de la música.
Los comienzos de FEAT
“Después de doce años como creativo, y dieciséis de músico, decidí apostar todo por la música. Pero llegó el Covid-19. En medio de la pandemia, en una sesión con mi socio Juan Cruz Marino (socio), donde componíamos y revisábamos obras creadas, caí en la cuenta de la diversidad de música y estilos que estábamos generando", cuenta Laborda.
Más allá de esa particularidad, la espectacularidad estaba dada por la metodología colaborativa entre colegas de bandas y pequeños estudios. “Ahí mismo vi que teníamos una manera de trabajar que iba a ser muy útil para la publicidad, una solución que en mi larga experiencia como creativo no había encontrado. Al instante, empecé a proponerle nuestro servicio a amigos de agencias”, cuenta el emprendedor.
Sólo en dos años, ya trabajaron para Pepsi, Budweiser, Paladini, Vogue, Jameson, Terma, por mencionar algunas marcas de renombre.
“Hicimos muchas, pero una de mis campañas favoritas fue para Pepsi, en Navidad, donde generamos una batería de melodías de trap solo con sonidos navideños: cañitas voladoras, campanitas, voces de Papá Noel, ruido de envoltorio de papel y más. La agencia y el cliente nos permitieron jugar mucho en esa campaña, y disfrutamos cada parte del proceso”, comenta.
Según cuenta el DJ argentino, las marcas y las agencias están cada vez más abiertas a estas propuestas. “Como estudio, siempre nos gusta sumar una propuesta extra, una que no esperaban. Justamente eso es el concepto de FEAT, un featuring, una colaboración de nuestro estudio de música para con cada una de las marcas que nos invitan a participar”, completa.
Próximamente Juani Labortda estará en Uruguay, Bolivia, México, y una fuerte gira de Verano por Punta del este, Pinamar, Mar del Plata, Necochea, Villa Gesell, Córdoba y más. La antesala a una nueva gira internacional para su segundo trimestre.
Todo esto, sin desatender FEAT. “Antes la publicidad me daba herramientas para mis shows. Hoy siento que los shows me dan aprendizaje para la composición musical. El contacto del vivo, el estar junto a miles de personas, ver y sentir sus reacciones a cada melodía que lanzo, entender qué les gusta y qué no, qué emociona, qué sorprende… es la gente la que te enseña”, explica el emprendedor.
“Eso es, justamente, lo que show a show leo y aprendo, para mis dos caminos, para mi próxima presentación y para mi próxima campaña publicitaria como músico. No podré prometerle a un cliente que miles de personas compraran su producto, pero sí que el universo musical que lo rodee sea más que correcto: que sea absolutamente perfecto y genere una reacción, la misma que busco cada vez subo a un escenario”.
