Según el informe global Deloitte 2024 Cxo Sustainability Report, 85% de las empresas aumentaron sus inversiones en sostenibilidad, mientras que el 45% afirma estar cambiando su modelo de negocios para contemplar este tema.
Además, la mitad de las organizaciones consultadas se encuentran desarrollando nuevos productos o servicios respetuosos con el clima. A nivel local esta tendencia está presente.
Compañías de diferentes sectores de actividad dan una vuelta de tuerca a su negocio para multiplicar el impacto y transformar su entorno.
A continuación, tres ejemplos de empresas que pusieron el foco en mejorar su entorno e innovaron para transformarlo.
ABITO: EL IMPACTO SOCIAL EN UN SECTOR DOMINADO POR LA INFORMALIDAD
Hace seis años surgió Abito -acciones por el bien de todos-, como proyecto de tesis que buscaba brindar soluciones para la gestión de residuos.
Al mismo tiempo, las empresas empezaron poco a poco a manifestar la necesidad de contar con un proveedor que brindara este tipo de servicio. Fue así como Soledad Chiarino y Francisco Voulminot decidieron ir más allá para dar respuesta a esta demanda.
Hoy Abito brinda soluciones a más de 150 empresas en Uruguay, mientras analiza su salida fuera de fronteras. Lleva compostados 1.5 millones de kilos de residuos y reciclados 2.4 millones. Si estos números se traducen en impacto, Abito evitó la tala de 45.000 árboles y las emisiones de CO2 equivalentes a 2.000 viajes ida y vuelta de Montevideo a São Paulo en auto a combustión.
Si bien el impacto más evidente de Abito es el ambiental, en lo social también están generando un cambio en la forma en la que se trabaja en un sector que históricamente ha estado vinculado a la informalidad.
"El triple impacto de Abito es que empleamos a personas que antes trabajaban en la informalidad en la gestión de residuos. Las sumamos a la cadena formalizada dándoles cobertura social, cuenta bancaria...
No habíamos dimensionado lo fuerte que es el impacto social que tiene formalizar cuando se estima que en América Latina el 70% de los residuos se reciclan en canales informales", indicó la empresaria.
REVASO: EL ARTE DE MULTIPLICAR LOS USOS
Miles de vasos descartables tirados por todo el predio. Esta foto después de un concierto fue la que impulsó al equipo de Revaso, allá por 2018, a buscar una solución para este problema poniendo foco en el consumo responsable.
"Comenzamos con una solución acá en plaza, de industria nacional, de vasos reutilizables y retornables. A los organizadores les resulta útil dar un vaso que incluye, además, el diseño del evento.
Por otra parte, para quien lo utiliza es más atractivo un vaso de estas características que uno descartable. Este se puede devolver -y recuperar la seña inicial- o llevar como re cuerdo", explicó Federico García, cofundador de Revaso. El ejecutivo detalló que un Revaso sustituye a siete descartables, evitando así volúmenes gigantes de vasos que terminaban en el vertedero.
Si este número se escala a todos sus clientes -entre los que se encuentran La Tras tienda, Arcos Dorados, MBC y Conaprole - y los eventos que hacen por año, el impacto es sustantivo. "Los Revasos son diseñados para ser utilizados cientos y cientos de veces, son irrompibles y, en última instancia, se pueden reciclar", agregó el ejecutivo.
García destacó, además, que más allá del impacto que generan en sus clientes, tienen un trabajo interno para disminuir la huella de carbono que ellos mismos generan. "La compensamos plantando árboles dos veces por año. Ya hemos plantado más de 400", sostuvo.
BITAFAL: ASFALTO SOSTENIBLE EN EL RUBRO VIAL
Bitafal se dedica al desarrollo de productos asfálticos eficientes, innovadores y sostenibles para la construcción de carreteras. La empresa cuenta con 40 años de trayectoria en la industria química y más de 30 en el rubro vial, donde hizo sus primeras incursiones con soluciones asfálticas que tienen ciertos componentes renovables.
En lo que respecta al impacto que la empresa genera en el rubro vial, Santiago Kröger, director técnico de Bitafal, señaló tres grandes líneas. La primera son las emulsiones asfálticas a base de agua utilizadas por el 70% de las obras.
"Esto implica que, una vez que se utiliza el producto, lo que se evapora es agua. Si se hiciera con solventes, este 70% de obras que usan emulsiones estarían emitiendo solventes y la situación respecto a la cantidad de emisiones sería peor", detalló Kröger.
En segundo lugar, cuentan con una nueva línea de asfaltos que permiten trabajar a menor temperatura de fabricación, lo que genera menos emisiones, ahorra combustible y ofrece un 50% más de durabilidad respecto a las alternativas tradicionales. Como tercera línea de impacto destacó la incorporación de recicladoras de pavimento que implican una clara in novación para el país.
"Usamos el propio pavimento como material de base del siguiente. Prácticamente un tercio de la red vial nacional ya ha tenido este tipo de tecnología dentro de sus obras".
*Este artículo fue publicado originalmente en Forbes UY del mes de octubre de 2024