Carolina Abuchalja: "En los niños es muy fácil fomentar las habilidades necesarias para ser innovador"
La fundadora de Edu School y miembro del rectorado de la Universidad de la Empresa, Carolina Abuchalja, aseguró que la tecnología es una aliada para desarrollar el pensamiento crítico.

Carolina Abulchalja subraya con convicción que el rol de los adultos en la formación del pensamiento crítico y creativo en los niños es fundamental. Como fundadora de Edu School, miembro del rectorado de la Universidad de la Empresa (UDE) y reciente doctora en Educación, se apasiona por las nuevas formas de enseñar y de adquirir conocimientos.

"En los niños es muy fácil fomentar las habilidades necesarias para ser innovador. Tienen la mente en blanco, sin condicionantes y están abiertos a aprender. Todo les da curiosidad. El tema es el adulto que tengan en frente. Ese que o los deja equivocarse o castiga el error", expresó Abuchalja.

La directora explicó que tanto los padres como los educadores que permiten preguntar, explorar y que ayudan a satisfacer la curiosidad de los alumnos, logran que se desarrollen mejor las mentes innovadoras. "Si en lugar de frenarlas las estimulamos, lo que logramos es que desde chiquitos tengan esa capacidad de ser creativos y de animarse a hacer", dijo.

"Hoy falta mucha estimulación. Los padres creen que en la pantalla (de celulares y computadoras) ellos investigan, pero en realidad el uso que hacen es muy pasivo. ¿La tecnología es una herramienta que puede motivarlos para que generen nuevas ideas? Por supuesto que sí, pero hay que saber cómo utilizarlas y ahí está la clave. Poder enseñar a tener un pensamiento crítico frente a los recursos que tenemos", consideró.

Por este motivo, tanto en el colegio como en la universidad el foco está en potenciar la necesidad de saber y de descubrir a través de aciertos y desaciertos. "Lo más importante es que experimenten con distintas metodologías, con recursos y, especialmente, que como adultos los alentemos incluso a equivocarse. Muchas veces por miedo de errar no se animan a hacer y si no hacen, ¿cómo van a crear?", reflexionó.