“La palabra que mejor describiría a Land Rover es pasión”, dice Matías Perdomo. Fanático de la marca inglesa, es propietario de la Range Rover Classic 1974.
Pero el alcance de su sentimiento es aún más amplio y lo llevó a crear Roverland en el departamento de Lavalleja, un espacio creado para los fanáticos de la marca.
La Range Rover Classic no es una unidad cualquiera, es el primer todoterreno de la historia del automóvil.
Esto implica que, además de ofrecer tracción permanente en las cuatro ruedas y bloqueo diferencial para situaciones de manejo de mayor complejidad, ofrece un andar de máximo confort gracias a una suspensión que fue pionera en los años 70 por la comodidad.
El conjunto motor es un V8 que combina potencia con un interior de lujo al estilo británico.
Perdomo destacó que la marca ofrece vehículos clásicos que se pueden seguir usando a diario y exigiéndoles el máximo rendimiento. Si bien esto aumenta los costos de mantenimiento como con cualquier auto moderno, lo gratificante es que perdura por generaciones dentro de una misma familia y, al no poseer tecnología de avanzada, el margen de rotura no es amplio.
*Este artículo se publicó originalmente en Forbes UY del mes de Diciembre de 2023