Llorar: permitido en adultos y reprochado en niños
¿Por qué, muchas veces, nos apena ver llorar a un adulto, pero nos molesta ver llorar a un niño? Las generaciones actuales están descubriendo nuevas formas de criar, basándose en el respeto, el amor y el reconocimiento de sus emociones. No más golpes, no más reproches, no más adjetivos. Estamos en la era de aprender a ser empáticos y tolerantes. Los niños nos necesitan, son nuestra mejor inversión.